Cosa de hombres

No es éste un naufragio cortés, por ello no ha hecho falta pedir a mujeres y a niños que fueran los primeros en ponerse manos a la obra. Entonces, va por ustedes, señores, que es lo que ha venido a decir el secretario general del Ministerio de Sanidad, José Martínez Olmos, cuando ha llamado a consulta a tres varones, además, conocidos por el gran público. Al magistrado de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska y a los televisivos Jesús Vázquez y Boris Izaguirre, los tres gays declarados. Y con todas las letras, porque por eso han sido convocados. No es que quisiera preguntarles si ellos tienen la fórmula para reducir las listas de espera, ni tampoco darles unos golpecitos en las rodillas para ver cómo andan de reflejos.

El cachete quiere dárselo el Ministerio a la estadística que dice que, de los 4.280 nuevos diagnósticos de infección por VIH, tres de cada diez se contagiaron a través de sus prácticas homosexuales. Martín Olmos pide a los tres convocados un juramento cuasihipocrático: que se comprometan a hacer campaña a favor del uso del preservativo en el colectivo gay.

El doctor reposo

Entre nosotros, titula Sanidad la campaña, lo cual no quiere decir que de a conocer la condición sexual de sus empleados, no, sino incidir en la prevención del virus entre los hombres que tienen sexo con otros hombres. Tanto a los que tienen riesgo de infección como a los que ya viven con el virus y no han dejado de ser sexualmente activos.

Quien dijo aquello de que los mejores médicos del mundo son el doctor dieta, el doctor reposo y el doctor alegría, tendría que vérselas ahora con nuestros tres protagonistas (sin contar a Martínez Olmos): Izaguirre, Grande-Marlaska y Vázquez. Es difícil adjudicar los papeles. Palabras engordadas de regocijo por un relajado Jesús Vázquez a una periodista de este periódico: «Animo a curas, empresarios y ministros a que salgan del armario». «Yo quería ser el banquero mejor vestido de mi país», decía a otro, también de esta casa, un estilizado y sereno Boris Izaguirre, entre risas. «Viví el desarrollo de mi sexualidad en un contexto marcado por la epidemia», reveló el juez ayer, quien también merece recordatorio en este texto: «Hay que seguir luchando porque la orientación sexual de cada uno no sea lo más relevante», ha dicho en más de una ocasión.

La campaña del Ministerio de Sanidad llevará el lema Entre nosotros, usa preservativo a 15.000 carteles, 140.000 folletos y 150.000 postales. Además, prevé distribuir 100.000 unidades preventivas (un preservativo y lubricante) en los colectivos homosexuales. Entre nosotros, se quiere dar un vuelco al diagnóstico.