Ellos jamás lo harían
La asociación protectora de animales 'No me abandones' presenta, como una iniciativa más, su tradicional calendario del año que viene
Actualizado: GuardarLlevan siete años acogiendo a aquellos animales que nadie quiere tener en casa. Los fines de la asociación son darles una vida digna y trabajar en favor de la adopción de muchas mascotas que quedan en la cuneta de cualquier carretera, cuando ya no entra dentro de los esquemas familiares. Toñi, que es la presidenta de la asociación, asegura que «hay que seguir concienciando de que los animales no son objetos sino seres vivos».
En cuanto a los fines de la asociación No me abandones, destaca su presidenta que «es muy importante la adopción como una medida para no sacrificar en cualquier matadero a los animales abandonados. Tenemos un referente claro con lo que ha pasado en Puerto Real. Por eso trabajamos no para sacrificarlos, sino para darles una vida digna».
En estos siete años de andadura, la asociación ha conseguido tener un lugar idóneo para una nueva vida, donde actualmente se mantiene a noventa perros; cada uno con su propia historia a cuestas. «Una de las iniciativas más importantes que hemos tenido en estos años -prosigue Toñi- ha sido la de venirnos todos los domingos al rastrillo de la Alameda Vieja a vender todo aquellos que la gente no quiere y nos da. Además es un punto de contacto con muchos que se acercan a nosotros».
Por 3 euros
Por otro lado, el calendario de 2008, que este año llega a su tercera edición , está ilustrado con estupendas imágenes de fotógrafos como Miguel Quirós, Miguel Ángel Castaño o Juan Sánchez. «Por tan sólo 3 euros, creo que logramos hacernos presentes en muchas casas», comenta Toñi.
Y si alguna persona desea tener un can con un pasado tormentoso, la asociación pone a su disposición una gama de razas y peculiaridades desgraciadamente bastante variada. Animales recuperados y perfectamente sanos, pues siguen a rajatabla las consultas al veterinario. «Sólo obligamos a los nuevos dueños que quieran adoptar una mascota a firmar un contrato lo suficientemente serio como para tener la seguridad de que el perro jamás volverá por este lugar a no ser que sea de visita», concluye Toñi.
