ESPAÑA

Tercer policía español asesinado en Francia

Raúl Centeno es el tercer agente de policía español asesinado en suelo francés. En 1977, los cadáveres de dos inspectores de la comisaría de San Sebastián que habían acudido a Hendaya a ver una película aparecieron enterrados en una playa de Anglet. Eso sucedió hace más de treinta años. Las pistas apuntaban a ETA, pero nunca se demostró su implicación. Desde entonces los miembros de la banda han protagonizado siete tiroteos con agentes de la Gendarmería francesa que trataban de detenerles. Pero no habían vuelto a segar la vida de ningún miembro de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad españoles en el país vecino.

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El 3 de abril de 1976, José Luis Martínez Martínez, de 31 años, y José María González Ituero, de 25, dejaron sus armas en Irún y se dirigieron hacia Hendaya. Habían comido en una pizzería de la capital guipuzcoana y su idea era pasar una agradable tarde al otro lado de la frontera.

Allí decidieron ir a ver una película en el cine Varietés, de Hendaya. En las puertas de este establecimiento fueron vistos con vida por última vez. Los agentes no acudieron a recoger sus armas, por lo que de inmediato se dio la voz de alarma.

La policía francesa llevó a cabo una operación de gran envergadura para localizar a los dos agentes, pero sin demasiados resultados. Hubo unos cuarenta detenidos, pero no se logró acertar con su paradero. ETA negó en todo momento su relación con el caso. La única pista que se encontró fue el hallazgo de la documentación de los policías en la casa de un miembro de ETA pm.

Los dos inspectores estuvieron desaparecidos hasta que el 19 de abril de 1977 tres adolescentes que jugaban en la playa Chambres D'Amour, en Anglet, se introdujeron reptando en un búnker construido durante la segunda Guerra Mundial. Allí, enterrados en arena, los jóvenes encontraron dos cuerpos en avanzado estado de descomposición. Estaban maniatados y presentaban mutilaciones en los dedos.