Deportes

Tranquilidad y paciencia dentro y fuera de la portería

El alicantino espera tener de nuevo su oportunidad para defender la meta de la que era titular

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Ahora le toca esperar, armarse de paciencia y tirar de su habitual tranquilidad hasta que le vuelva a llegar una oportunidad. Es duro, pero las circunstancias han hecho que Chema vuelva a ser el portero suplente de un equipo que antes veía desde la puerta azulina. Una inoportuna lesión, justo en el momento que se cambiaba de entrenador, ha dejado al meta nacido en Orihuela en la suplencia. Ni a Chema, en el terreno deportivo, ni ha José María Jiménez Pérez, en la vida cotidiana, le gusta el estrés, las prisas o los agobios. Por ello, antepone los resultados del conjunto, por encima del aspecto personal. Es más, «prefiero no jugar y que el equipo mantenga la categoría».

8.00

No es perezoso y prefiere madrugar

Al portero no se le pegan las sábanas. Es de los que prefieren madrugar para hacer todos sus preparativos con tiempo. Por eso, Chema no se levanta más tarde de las ocho para desayunar con tiempo y leer la prensa. Un buen tazón de leche y cereales son la base de la primera comida del día.

9.00

Desayuno y prensa con calma

Lo de comprar el periódico no es una cosa demasiado habitual. Al meta azulino le encantan las nuevas tecnologías y repasa toda la actualidad deportiva a través de la red. Muchos de sus compañeros dicen no leer nada de lo que se escribe en la prensa, o al menos, no lo reconocen. Chema no tienen ningún problema, y le gusta estar completamente informado.

10.30

El primero en llegar al vestuario

Lo de levantarse temprano tiene una principal razón: llegar con bastante tiempo al vestuario. El portero del Deportivo inicia su jornada laboral cuidando al detalle, por lo que cambia las prisas, por el cuidado en la preparación del material, un masaje o unos abdominales antes de saltar al campo de entrenamiento.

Ya ha superado prácticamente su lesión, y, de hecho, ya entra en las convocatorias, pero ahora entrena cada día sabiendo que tendrá que ver el partido desde el banquillo.

Para él, el la jornada previa al encuentro no es demasiado especial. Únicamente se la toma con un poco más de calma, y por ello suele volver a su casa cuando acaba la sesión de entrenamientos.

14.00

El cocinero de la casa

No tiene ningún cocinero que ponga en práctica los consejos del endocrino azulino, así que cambia los guantes por la sartén y se convierte en el cocinero de la casa.

9.00

Fútbol, Play, música...

Las tardes previas al encuentro las pasa con tranquilidad. Si es lejos de Jerez, como es el caso, dará una pequeña vuelta por Vitoria para comprar algunas compras de Navidad. Por lo demás, dedica su tiempo libre a ver el fútbol, las consolas (prefiere los juegos de coches o roll por encima de los de fútbol) y sobre todo a escuchar toda la música que se descarga de internet.