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La Justicia frena la declaración de los científicos del Banco de Células Madre
Una magistrada de Granada y la Fiscalía suspenden el interrogatorio, previsto para hoy El TSJA archivó hace un lustro una denuncia similar contra la Consejería de Salud
Actualizado: GuardarSe impuso la cordura. La Justicia corrigió ayer, y todo apunta a que esta segunda decisión no tendrá ya vuelta de hoja, una situación que la misma Justicia creó. La magistrada sustituta del Juzgado de Instrucción 8 de Granada y la Fiscalía han acordado suspender la declaración, prevista para hoy, de los científicos del Banco de Células Madre imputados por un presunto delito de manipulación genética. La insólita medida fue adoptada hace unos días por el magistrado titular del tribunal y un representante del Ministerio Público. Dos compañeros les han rectificado ahora.
Tras constatar la difusión de la noticia, que adelantó este periódico, la jueza y la Fiscalía pactaron que el interrogatorio no era necesario y se concedían un tiempo -que será breve- para encauzar un asunto que, normalmente, no debería haber llegado hasta donde ha llegado. Salvo sorpresa, el caso será archivado. Las células madre no se sentarán en el banquillo de los acusados.
Juristas de toda solvencia consultados por este periódico indicaron que no hay base legal -ni social- para someter a un proceso penal a los trabajadores de un centro que intentan hallar soluciones a males crónicos como la diabetes o el Parkinson.
Oposición
Además, la propia Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ya se opuso en el pasado a una iniciativa de similares características. Es decir, que la doctrina de dicha institución es contraria a interferir el trabajo que se desarrolla en los laboratorios de biomedicina y medicina regenerativa.
Carpetazo
En aquella ocasión, corría el año 2002, el Ministerio Público andaluz dio carpetazo a una denuncia que reclamaba la imputación del consejero de Salud de la Junta, que por aquel entonces era Francisco Vallejo, por impulsar y regular la investigación con células madre. El tema no trascendió y pasó desapercibido.
Mientras tanto, Carmen Areoso Villaverde, una mujer vecina de Santiago de Compostela y autora de la denuncia que ha propiciado la apertura de diligencias judiciales contra los investigadores, confirmó ayer a Europa Press que lo hizo por «cumplir con su conciencia» y porque está «muy sensibilizada» respecto a la «manipulación genética».
Esta mujer, que es madre adoptiva y está en contra de la manipulación genética, indicó que es voluntaria en Radio María y que, a través de la colaboración con Red Madre -asociación que ayuda a futuras madres en riesgo de aborto por las dificultades en su embarazo-, formuló su denuncia porque «está en contra de las investigaciones con células madre, que hasta ahora no se sabe que hayan dado resultados positivos». Añadió que con su actitud «cumplió con su conciencia» y con la idea de que «el fin no justifica los medios». Además, confirmó que otras dos amigas han puesto demandas en otros juzgados.