MATRIMONIO. El juez y su esposa Elisa Beni. / EFE
ESPAÑA

Jueces y fiscales no acuden a la presentación del libro escrito por la mujer del juez Bermúdez

La periodista Elisa Beni pidió disculpas a los juristas y a las víctimas que se hayan sentido ofendidas por la publicación

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Los jueces y fiscales de la Audiencia Nacional dieron ayer la espalda a la periodista Elisa Beni, la esposa del presidente del tribunal del juicio del 11-M, Javier Gómez Bermúdez, y no acudieron a la presentación oficial de su libro sobre el mayor atentado ocurrido en Europa pese a estar casi todos ellos invitados.

Beni entró por la tarde en la sala junto a su marido, rodeados por más de una docena de cámaras de televisión. Defendió su libro y la honradez de su trabajo frente a las duras críticas que ha recibido, pero, tras mostrar su «admiración y afecto por el trabajo de todos los jueces y fiscales», pidió disculpas si alguno se ha sentido ofendido, «pues nunca quise herirles». Extendió la petición de perdón, en este caso «de todo corazón», a las víctimas del 11-M a las que haya ofendido su libro, porque indicó que «eso es lo único que me duele». Lo que sí quiso dejar claro, en tercer lugar, es que no ha escrito el libro al dictado de Gómez Bermúdez . «Eso no lo he hecho nunca y ahora tampoco», aseguró.

«Deslealtad personal»

El libro La soledad del juzgador: Gómez Bermúdez y el 11-M, que salió a la venta el pasado día 20, ha creado un fuerte malestar entre buena parte de los juristas, sobre todo de la Audiencia Nacional, y entre alguna de las principales asociaciones de víctimas de la masacre que, como en el caso de Pilar Manjón, presidenta de la mayoritaria, tiene previsto presentar una queja ante la Fiscalía. Unos y otros críticos creen que el libro es inoportuno y oportunista, que desvela conversaciones confidenciales que mantuvieron durante el proceso con Gómez Bermúdez y que se ha elaborado con el único fin de enaltecer al juez.

Alfonso Guevara, uno de los tres miembros del tribunal del 11-M, envió el viernes pasado a Gómez Bermúdez y al presidente de la Audiencia Nacional, Carlos Dívar, una carta en la que califica de «deslealtad personal y profesional» la publicación y su contenido. El otro miembro del tribunal, Fernando García Nicolás, fue más discreto, pero dejó claro a sus más próximos que tampoco le ha gustado la publicación de un libro que habla de él y de su trabajo y que se ha gestado a sus espaldas.

Ni un magistrado ni el otro, ni Dívar, ni miembros de la Fiscalía, ni la fiscal del caso, Olga Sánchez, ni los jueces de instrucción del tribunal central antiterrorista, ni los componentes de la Sala de lo Penal de este órgano, ni miembros del Poder Judicial. A la presentación del libro no fue casi ningún juez o fiscal vinculado con el asunto. Entre los escasos asistentes estuvo el presidente del Tribunal Superior de Madrid, jefe de Elisa Beni, que dirige el gabinete de prensa.