La genialidad de Sánchez Verdú coge hoy la batuta en el Falla Scarlatti made in Spain
El prestigioso músico algecireño dirigirá esta noche a la Orquesta Manuel de Falla La juventud de la Orquesta de Cámara Andaluza llega al Palacio de Congresos
Actualizado: GuardarEl compositor y director algecireño José María Sánchez Verdú demostrará hoy sobre el escenario del gran teatro gaditano porqué el pasado jueves fue distinguido como Director Honorífico de la Orquesta Manuel de Falla. A las nueve de la noche tomará la batuta para que los jóvenes músicos que forman la sinfónica interpreten el repertorio que ha seleccionado para tal ilustre ocasión: obras de Ernesto Haffter y del compositor gaditano Manuel de Falla. Además, y para celebrar esta quinta edición del Festival de Música española de Cádiz, la Orquesta estrenará dos obras hechas especialmente para el certamen por encargo del Patronato Provincial de Música Manuel de Falla. Son Suite Kardia, de Francisco M. Toledo (1967), y Esencias del recuerdo, de Enrique Busto (1974).Sánchez Verdú ha actuado con numerosas agrupaciones en España, Alemania e Italia, centrándose principalmente en la música actual. Sus más recientes actuaciones han sido con la Orquesta Ciudad de Granada en el Festival de Alicante y la dirección de su ópera GRAMMA en la temporada de la Deutsche Oper de Berlín.
Además, a las siete de la tarde en el Palacio de Congresos y bajo la dirección de Roy Theaker, la Orquesta de Cámara Andaluza interpretará los estrenos del Curso de Composición de la Cátedra Manuel de Falla.
El violín de Malikian
Por otro lado, mañana, el Festival de Música vivirá una de sus citas más importantes. El brillante violinista y director Ara Malikian llega a la ciudad para actuar a las nueve de la noche en el Palacio de Congresos. Malikian está considerado uno de los más expresivos e innovadores violinistas de todo el mundo. Poseedor de un amplio repertorio, ha tocado en prestigiosos escenarios de los cinco continente. Se puede considerar a Domenico Scarlatti como uno de los más conocidos asimilados de la música española. Nacido allende de nuestras fronteras, concretamente en Nápoles, la marca que en su estilo compositivo deja nuestro folklore, evocado a través de danzas o incluso de la guitarra, es innegable. Sus sonatas para clave están repletas de rasgos del arte andaluz. El tango, el fandango o la Petenera se convierten, en manos de Scarlatti, en el arquetipo sobre el que construir su personal elaboración, llena de colores sonoros, de pureza en la melodía y de guiños a nuestro tradición.
La Orquesta Barroca de Sevilla se ha convertido, gracias a los patrones de calidad a los que nos tiene acostumbrado, en uno de los referentes musicales de este Festival, y en general de la música de producción andaluza. El pasado viernes hizo su presentación en un escenario poco habitual para ellos como fue el Teatro Falla. El programa rendía homenaje a Scarlatti, en el 250 aniversario de su muerte, a través de una muestra de su música vocal, incluyendo además dos obras de Charles Avisor, compositor ingles que se dedicó a adaptar a formaciones instrumentales las famosas sonatas compuestas por Scarlatti.
El resultado de la propuesta se tradujo en una interpretación de gran altura. La orquesta, con un Figueiredo inmensamente mejor clavecinista que director, hizo gala de una excelente cohesión y empaste entre sus secciones, tan solo alterada por ciertos momentos de excesivo sonido de la concertino en la Sinfonía inicial y la Cantata Doppo lungo servire. Faltó algo de precisión y definición en la difícil labor solista que el violín ejerció en el Concierto de Avison, aunque estos aspectos no impidieron una excelente calidad en los recursos técnicos, articulaciones y fraseos con los que la orquesta llevó a cabo su labor. Carlos Mena fue, como va siendo una costumbre, de lo mejor de la noche. Su voz cálida y tenue se movió sin ninguna dificultad entre el legato y las agilidades. Para él fueron los más insistentes aplausos del público.