«He nacido para navegar y vivir por y para la mar»
Ha dedicado toda su vida a la mar y desde hace cinco años y medio dirige, con mucho orgullo, El Vaporcito de El Puerto
Actualizado:1 ¿Cuántos años lleva navegando en El Vaporcito de El Puerto?
-Llevo más de cinco años haciendo doce viajes al día en invierno y catorce en verano.
2 ¿Qué siente al llevar un barco con tanta historia?
-Para mí es una gran satisfacción llevar un símbolo tan importante y que tiene tanta repercusión en la cultura. Es conocido en todo el mundo y para mí eso es un orgullo.
3 ¿A qué se dedicaba antes de ser el patrón de Adriano III?
-Me he llevado toda la vida dedicado a la pesca. Desde los 14 años he estado embarcado y he visto mucho mundo. Pero cuando llegó la crisis en la pesca, por la negativa de Marruecos a que los barcos faenaran en sus aguas, me quedé parado y después ya me embarqué en esta nueva aventura.
4 ¿Y se marea mucho con tanto oleaje?
-Nunca me he mareado. Siempre he visto que los chavales jóvenes que se embarcan la primera vez lo pasan fatal, pero yo he nacido para la mar.
5 ¿Y su familia, cómo lleva el que sea marinero?
-Mi mujer e hijos lo pasaban muy mal cuando me iba lejos, pero ahora están muy contentos porque paso todas la noche en casa.
6 ¿Os afecta mucho el servicio de catamarán?
-Se nota bastante porque es más rápido. Los turistas siguen prefiriendo El Vapor, pero la verdad es que el catamarán hace bastante daño. Nosotros ofrecemos la ida y vuelta por cuatro euros y la ida sola por tres, y mucha gente opta por el nuevo barco porque es algo más barato al estar subvencionado. Hace falta que las administraciones apuesten un poco más por este símbolo.
7 ¿Y los turistas?
-Bueno, se lo pasan en grande. Algunos me preguntan si puedo parar el barco para bañarse. Les encantan sobre todo los días de oleaje fuerte y les llama la atención muchísimo toda la Bahía. Algunos hasta me dan propina cuando hay mucho viento porque creen que yo soy el que provoca los movimientos bruscos.
Y LA MEDIA LA PONE USTED...
-El Vaporcito de El Puerto necesita el apoyo de las administraciones para que pueda seguir navegando por las aguas gaditanas. Es un símbolo que no puede desaparecer.