Los detenidos por los incidentes en Barcelona pasan a disposición judicial
Una veintena de mossos resultaron heridos aunque sólo uno tuvo que ser hospitalizado
BARCELONAActualizado:Los jóvenes detenidos el pasado sábado tras los incidentes registrados en la manifestación antifascista que discurrió por el centro de Barcelona han pasado a primera hora de esta mañana a disposición judicial.
Tras los disturbios fueron arrestadas siete personas aunque finalmente son cuatro las que siguen detenidas. Dos quedaron en libertad tras ser identificadas y una más ha pasado a disposición de la Fiscalía de Menores. Durante la marcha, los 'ultras' destrozaron comercios y mobiliario urbano y agredieron a dos policías de paisano. 22 mossos resultaron heridos aunque sólo uno tuvo que ser hospitalizado.
Los cuatro detenidos participaron en una manifestación en protesta por la muerte en Madrid de un adolescente a manos de un ultraderechista. Desde las 09.00 horas están a disposición del Juzgado número 3 de Barcelona.
Los incidentes se registraron en la tarde del pasado sábado. Los antifascistas catalanes -un millar, según la Policía de la Generalitat- salieron a la calle para expresar su repulsa por el asesinato, el pasado día 11, del adolescente Carlos Javier Palomino Muñoz en Madrid a manos de un ultraderechista en el metro de Legazpi.
El dispositivo policial no evitó los incidentes
La marcha partió sobre las seis de la tarde de la plaza Universidad en medio de un gran dispositivo policial que, sin embargo, no impidió que se registraran violentos incidentes en el centro de la capital catalana.
Los altercados más graves se produjeron frente a la sede de la Conselleria de Interior, en la Vía Laietana, donde los radicales arrojaron botellas de vidrio, piedras y otros objetos contundentes, como enormes vallas de obra metálicas, contra los agentes que custodiaban el edificio, que sufrió numerosos desperfectos.
Los Mossos d'Esquadra tuvieron que realizar varias cargas policiales y disparar pelotas de goma para disuadir a los manifestantes, que finalmente se dispersaron y no llegaron a la plaza de Sant Jaume, donde estaba previsto finalizar la marcha.
La protesta dejó 22 mossos d'esquadra heridos que presentaban brechas y contusiones. Sólo uno tuvo que ser hospitalizado tras quedar inconsciente por el impacto de un objeto contundente lanzado por parte de los manifestantes.