Lectura comprensiva
Nadie duda que hacer deporte mejora la salud y que no hacerlo comporta riesgos para ella. Lo que no todo el mundo tiene tan claro es que con la lectura pasa algo parecido. Leer no sólo proporciona cultura y ayuda a escribir sin faltas, es sobretodo una necesidad intelectual, imprescindible para estructurar nuestra mente. Sólo quien lee, puede ordenar su pensamiento y expresarlo correctamente.
Actualizado:Pero si la lectura no va acompañada de la comprensión de lo que se lee, se termina convirtiendo en la expresión ordenada de sonidos, que carecen de sentido para quien los pronuncia. Este empieza a ser el principal déficit formativo de nuestros jóvenes a los que, la mayoría de las veces, se les ha enseñado a leer con relatos incomprensibles.
Como muestra un botón. Mi hija, en tercero de primaria, tiene como libro de lectura «El ladrón del salchichón», en el que un perro llamado el Sabueso Orejotas y su ayudante el Gato Floro, ambos detectives, resuelven el robo de un salchichón, perpetrado por la Urraca Pirraca, en la Ciudad Amable. Por supuesto, el libro va acompañado de una guía de lectura y un CD, única manera de que el profesor y los alumnos, puedan enterarse de los valores que el cuento pretende transmitir. Ya saben; educar es un juego y aprender es divertido.
Pero la comedia se convierte en tragedia, cuando con dieciocho años, pasan del Sabueso Orejotas al Estatuto de los Trabajadores o al Código Civil, que carecen de guía y de CD de apoyo, son en blanco y negro y no tienen actividades para pintar y colorear o para recortar y pegar.
Indigna ver a jóvenes de inteligencia y voluntad normal, totalmente desmotivados porque son incapaces de comprender lo que leen. La Universidad lleva años organizando actividades de nivelación, es decir cursos previos e intensivos de matemáticas, física, biología, etc. Imprescindibles para que los alumnos puedan entender las explicaciones. Creo que también en el campo de las ciencias sociales, habrá que pensar en organizar cursos de nivelación de lectura comprensiva, para que nuestros alumnos puedan entendernos y puedan comprender los textos que deben leer.