
Los vecinos de Segunda Aguada se manifiestan contra el tráfico pesado
La protesta, que concentró a unas 300 personas, obligó a cortar el tránsito de vehículos de cinco a ocho de la tarde Denuncian «la falta de seguridad y la gran contaminación»
Actualizado: GuardarLa concentración de ayer contra el paso de vehículos pesados estuvo organizada por la nueva asociación de vecinos Avenida Segunda Aguada. «Este es el primer paso de la lucha, que será larga. El objetivo de eliminar el tránsito de camiones de nuestra zona es difícil, pero se puede conseguir», afirmó, con gran optimismo, el presidente de la nueva entidad, José Pichardo, instantes antes de iniciar la marcha. Una manifestación que fue encabezada por los titulares de Puntales, José Manuel Hesle; Cerro del Moro, Julia Sánchez Vaca; Bahía Gaditana, Manuela Molina; la Federación 5 de Abril, Antonio Gómez y la Unión de Comerciantes, Salvador Muñoz, así como la concejal socialista, Marta Meléndez. Todos ellos portaron una pancarta que rezaba: Camiones no, menos camiones y más soluciones.
La hora de la convocatoria, las cinco de la tarde, hizo que algunos vecinos optasen por otear la manifestación desde la ventana de sus hogares recién levantados de la siesta. A muchos de ellos las arengas por el megáfono les sirvieron de despertador: «¿Vecino baja, te necesitamos en esta lucha!».
Los comerciantes también se solidarizaron con la causa y echaron el cierre a sus negocios durante la marcha. «Estamos colaborando y apoyando a los vecinos que llevan reclamando una solución desde hace años. Creemos que eliminar los camiones es una petición justa, un derecho de los residentes y los comerciantes. En Segunda Aguada, por ejemplo, hay más de 120 comercios que se ven afectados diariamente debido al constante tráfico de camiones. Sufrimos ruido, malos olores y contaminación acústica y medioambiental», advirtió Salvador Muñoz, el presidente de la Unión de Comerciantes.
Varios atropellos
José López, empleado del servicio de limpieza municipal, hacía hincapié en la falta de seguridad que sufren los peatones en la zona y recordaba los últimos atropellos en Lacave, Segunda Aguada y San Severiano. «Teniendo en cuenta que este es el núcleo de densidad poblacional más grande de Cádiz resulta un peligro constante que pasen por aquí tantos camiones, puesto que es una calle muy estrecha para tener dos direcciones. El otro día, sin ir más lejos, a un compañero un camión le llevó el carrito de la limpieza que estaba en la acera», detalla.
Otros vecinos que también participaron en la concentración, José Luis Carvajal y su mujer, Carmen Taboada, también denuncian «el ruido y la contaminación que producen los camiones». La situación es tal que «la mayoría ha optado por instalar doble ventana en sus casas para poder dormir».
El radar, una realidad
Cabe decir que, a petición vecinal, desde hace varias semanas, la Policía Local instala el radar diariamente en la zona para controlar la velocidad de los camiones y vehículos que está limitada en 40 kilómetros por hora.