Atajarlo
El fenómeno social de la confrontación juvenil es un hecho. Grupos organizados y financiados de jóvenes, tanto de ultraderecha como de ultraizquierda, se enfrentan entre sí. En la periferia de Madrid aparecen pintadas, pasquines y propaganda incitando a la guerra entre ellos. Los antifascistas crean comandos de acción en las calles contra los skin heads. Por ahora, esto no ha creado demasiada alarma social.
Actualizado: GuardarUna grave responsabilidad incumbe a la autoridad, para cortar de raíz estos brotes de violencia. Muy lamentable la muerte de un joven en circunstancias no aclaradas del todo, pero cuando estas desgracias se airean, como justificación y banderín de enganche para el reclutamiento, la venganza y el contraatake, el camino se hace muy peligroso para la entera sociedad. El fenómeno de la violencia juvenil requiere un debate político en profundidad por parte de todas las instancias responsables para buscar, entre todos, la solución adecuada y denunciar las causas de este fenómeno social. Estamos a tiempo.
Miguel Revilla Cádiz
