Güiza entra «en otro mundo»
El jerezano llegó a la concentración de la selección en la hora límite, intranquilo porque su futuro hijo «está enganchado y no sale» Reconoció que tiene una prima de 300.000 euros si debuta con España
Actualizado: Guardar«¿Venga, dale, primo, que llego tarde, pisha!» Con estas palabras y a la carrera se presentó el jerezano Dani Güiza ante los periodistas en la concentración de la selección española en Las Rozas. Era su primer día como internacional, accedía a la Ciudad del Fútbol con la hora pegada. No quería defraudar tan pronto a Luis Aragonés, el técnico que le hizo debutar en Primera como mallorquinista y al que no extrañan sus retrasos y cansancios porque ya le provocaron alguna cabezadita durante las charlas del Sabio en Palma. Eran otros tiempos de un chaval de 20 años inmaduro y sin formación.
Con su gracejo, alegría innata y particular forma de entender su profesión, el ariete bermellón, de 27 años, se convirtió nada más llegar en el gran protagonista del combinado nacional, que inició este miércoles su preparación para los choques ante Suecia e Irlanda del Norte que cerrarán la clasificación para la Eurocopa'08. Encantado de verse rodeado de cámaras, micrófonos, libretas y plumillas, Güiza enseguida entendió que se sumergía en la elite, en una realidad muy diferente a esa terrible infancia entre chabolas y a una carrera repleta de altibajos por culpa de esa noche que, según su propia versión, tanto confunde a los futbolistas.
«Este es otro mundo pero me viene muy bien y ojalá repita», decía al verse al fin reconocido entre los 20 mejores de España. Antes de que se le abrieran las puertas de la residencia rozeña, Güiza confesaba estar inquieto por ver a ese hijo que espera con ansiedad desde que hace unos días su pareja, la popular Nuria Bermúdez, salió de cuentas. «Sí estoy intranquilo. A ver si sale ya, que ya es hora... El niño está ahí enganchado, colega...!», rumiaba el máximo goleador español en este arranque de curso.
Le costó reconocer que su crío nacerá con un pan debajo del brazo. ¿Es cierto que en su contrato con el Mallorca existe una cláusula por la que recibirá 300.000 euros si debuta la selección? «No lo sé. Lo que diga la gente me da igual», respondía Güiza, que se hizo el remolón en un primer momento. Lo ha comentado Quique Pina, su representante, se le recordó. «Entonces..., si lo ha dicho él, a lo mejor será así» matizó el ex del Getafe, decidido a no ocultar más la realidad tras verse acorralado. «Sí, es verdad, tengo ese premio pero sólo si juego al menos un minuto; si no, nada de nada».
Pasada la una del mediodía, la hora de citación en sede federativa, Güiza estaba un «poquito apurado» porque, según comentó, «se retrasó el avión que llegaba de Mallorca». Por eso, terminó su encantadora comparecencia casi como la empezó. «¿Vamos, venga primo, que si llego tarde no veas!».
De alto riesgo
La Comisión Antiviolencia acordó, por otro lado, declarar «de alto riesgo» el partido del sábado en el Santiago Bernabéu, al coincidir con dos manifestaciones de grupos neonazis y antifascistas que se celebrarán el mismo día en el centro de Madrid, después de que un joven fuese asesinado el domingo en el metro de Legazpi.
El despliegue policial será más numeroso de lo habitual en el Bernabéu y sus alrededores para intentar evitar incidentes violentos. También se espera la llega de unos 6.000 aficionados suecos a la capital para presenciar en directo el encuentro de clasificación para la Eurocopa.