La zurda canaria se llevó los tres puntos

Duelo de zurdos en el Municipal de Chapín. Por un lado, un joven jugador canario con experiencia en varios equipos de Segunda División y que ha vuelto a tener continuidad y minutos; por otro lado, un veterano y experimentado sevillano cuya pierna izquierda es una auténtica máquina de poner goles a los delanteros más espigados.

Momo y Luque se veían las caras en el verde del coliseo jerezano. Cada uno por una banda del campo, desde el principio presentaron sus credenciales. En los últimos días, el nuevo técnico del Xerez, Juan Martínez, Casuco, ya había avisado del peligro del Granada a balón parado en jugadas de estrategias. Buena parte de culpa la tiene el golpeo seco del interior zurdo de Cantillana y la afición azulina ya había sufrido, con goles en contra, la zurda de Luque.

Sin embargo, el interior del Granada 74 no se imaginaba que el sevillano David de Coz iba a ser una dura sombra. El lateral azulino presionó hasta el límite a Luque, dejándole sin opciones a la hora de colgar balones al área, donde esperaba Javi Guerra y Francisco.

Por el otro lado, Momo se pareció un poco más a aquel jugador que debutó con el Xerez en Copa ante el Racing de Ferrol. El ex del Deportivo de La Coruña estuvo muy participativo, y sus cambios de ritmo con el esférico pegado a la bota fueron muy importantes para un Xerez que cambiaba su ataque de izquierda a derecha, sacándole frutos también al juego desplegado por Pedro Ríos.

Sin embargo, el primero en golpear fue Luque. El sevillano, muy intermitente sobre el césped, fue el autor del gol del empate para el combinado granadino en el minuto 17. Y es que otra cosa no, pero el veterano futbolista rojillo es casi infalible desde los once metros.

A partir de ahí, monólogo de Momo que acabó con el jugador canario casi desfondado y marchándose al banquillo sustituido por Carlos Calvo a falta de diez minutos para la conclusión de un choque donde el duelo de zurdas lo ganó el interior izquierdo del Xerez Deportivo.