El jefe del Gobierno viaja a Argentina y Uruguay para mediar en la crisis de las papeleras
Finalizada la agitada Cumbre Iberoamericana, el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, se trasladó ayer a Buenos Aires para reunirse con su homólogo argentino, Néstor Kirchner, y con su esposa, la mandataria electa Cristina Fernández. Y hoy viajará a Uruguay, donde se encontrará con Tabaré Vázquez.
Actualizado: GuardarZapatero tratará de mediar en el conflicto de la planta de celulosa que enfrenta a ambos países y que oscureció los resultados generales de la cumbre. El Rey también ha mediado en este asunto entre ambos países que deja a las empresas españolas en mala situación.
Antes de partir, el presidente exhortó a Buenos Aires y Montevideo a «que mantengan el diálogo». Durante su visita a territorio argentino, el jefe del Gobierno tiene previsto recorrer el nuevo monumento a los desaparecidos por la dictadura militar que el presidente Kirchner y su esposa inauguraron esta semana junto al río de la Plata.
Inversiones en el país
En la residencia oficial de Olivos, los gobernantes también dialogarán acerca de las inversiones de España en el país sudamericano. El capital español controla empresas claves de como la que provee de gas, electricidad y telecomunicaciones. Además tiene fuertes intereses en el sector de hidrocarburos, transporte aéreo y bancos. España, que respaldó fuertemente al Gobierno Kirchner, espera que durante la gestión de su esposa se logren algunos beneficios como el proyectado aumento de tarifas de los servicios públicos.
Zapatero abordará, asimismo, con el matrimonio Kirchner el proyecto de invertir 10 millones de euros en la remodelación del teatro Cervantes de Buenos Aires para que esté listo en 2010 cuando se celebre el bicentenario de Argentina.
