CARGA. Varios jugadores del Portuense trasladan una portería durante el entrenamiento de ayer en el Cuvillo. / ANTONIO VÁZQUEZ
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Derbi de necesidades en el Cuvillo, donde se espera el 'efecto Orúe'

Portuense y Algeciras están empatados a puntos y en la zona de descenso Los algeciristas llegan a este complicado duelo con cinco bajas importantes

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Aunque la nave portuense comienza a levantar el vuelo desde la llegada del experimentado Orúe, sus resultados no han terminado de verse sobre el césped sintético del Cuvillo, donde aún no ha ganado ningún partido. Y «ya toca», confesó de manera rotunda el preparador del once gaditano.

Esta tarde, la ocasión es perfecta. Por un lado, enlazar dos victorias consecutivas. Por otra, dar una alegría -la primera- a la afición en su estadio y por último, vencer en el derbi provincial ante un Algeciras al que, además, se adelantaría en la clasificación.

Desafortunadamente, el efecto Orúe no ha terminado de hacerse notar en el Cuvillo. Quizás porque aún el entrenador jerezano no ha comenzado a trabajar como es debido el ataque -la defensa ya la ha apuntalado a las mil maravillas y las salidas a la contra funcionan a la perfección- o quizás porque el césped artificial está jugando una mala pasada a una plantilla cargada de jugadores que están tardando en adaptarse a él.

Todo indica que Orúe repita el mismo once que consiguió la victoria en Alcalá la semana pasada. Un triunfo que ha dado tranquilidad a la plantilla tal y como ha apuntando el técnico. «Hemos tenido una semana más tranquila donde la gente ha estado mucho más alegre y donde intentaremos ganar ante nuestro público después de cinco partidos sin conseguirlo».

Fiel a su estilo

Fiel a su estilo, ha estudiado al rival hasta el mínimo detalle. Ayer mismo, comenzaron el entrenamiento repasando los vídeos que se tenían del Algeciras. En este sentido, advierte que será un partido difícil ante un equipo necesitado «como nosotros», sostiene.

Está claro que los objetivos para él no pueden ser los mismos que para sus pupilos. Entre otras cosas porque Orúe ha cogido un equipo que no es el suyo y en descenso. Por el contrario, sus jugadores eran sabedores que afrontaban una temporada donde la misión era la del ascenso. Así lo suscribe, por ejemplo, Velázquez. «Bueno, ahora mismo te ves ahí abajo pero la diferencia es de tres partidos con los de arriba. Además, aquí se ha hecho un equipo para ascender y por ello no hay que esconderse», dice con valentía el lateral gaditano. El contraste lo ofrece su jefe, quien no mira más allá del choque de hoy. «Nunca voy a medio plazo. Sólo pienso en el Algeciras, luego pensaremos en Jaén, Talavera, Lucena y demás. Lo único que me preocupa es el partido frente al Algeciras. Debemos ganar tres partidos seguidos para salir de ahí», argumenta.

No obstante, Orúe saca pecho y no descarta nada porque «desde que estoy yo tenemos puntos para estar en puesto de liguilla. Aunque no nos corresponde estar arriba y debemos salir de la zona de abajo. Pero nos equivocamos si miramos a los que están arriba en la clasificación».

No quiere dar pistas a su rival sobre el once que sacará de inicio hoy aunque avisa que «no me fastidiaría repetir el once del pasado domingo aunque puede que haya algún cambio», dice para crear dudas en el técnico algecirista.

Y si el Portuense cuenta con todos sus jugadores disponibles, no puede decir lo mismo el Algeciras, que afronta otro choque clave con muchos problemas y con un vestuario plagado de lesionados. Y es que el técnico rojiblanco no puede contar con Mario, Curro, Juampe y Pedro que siguen en el dique seco y son dudas Manuel Ángel y Nico Chientino.

Para colmo, el Algeciras se ve en la imperiosa necesidad de tener que empezar a puntuar cuanto antes fuera del Nuevo Mirador si quiere ver el futuro mucho, muchísimo más claro de lo que lo tiene ahora. Con dos equipos necesitados sobre el césped, la emoción está asegurada.