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COLOSO. Reyes intenta levantarse ante Drobnjak y Vroman. / EFE
BALONCESTO LIGA ACB

La defensa del Real Madrid acaba con las aspiraciones del Akasvayu

El equipo catalán cosechó su cuarta derrota consecutiva en tres semanas Smith y Bullock lideraron a los blancos

EFE
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El Akasvayu Girona perdió su cuarto partido consecutivo, en las últimas tres semanas y ha visto completamente frenada su buena serie de resultados en la liga ACB perdiendo por 83 a 94 ante un gran Real madrid liderado por Charles Smith y Louis Bullock. El cuadro blanco recuperó la mejor versión de su dupla de americanos tiradores y cuando ellos dos están en estado de gracia es harto complicado que se les escape la victoria.

El partido tuvo unos 5 primeros minutos en los que el conjunto local navegó por completo en los que el Madrid consiguió una ventaja de 8 puntos. El poderío en la pintura del griego Lazaros, la solvencia en la dirección de Raúl López y de un cada vez más integrado en el plantel blanco Sergi Llull y la efectividad desde el perímetro de Bullock y Smith, el equipo de Joan Plaza fue marcando distancias en el luminoso. Sin embargo, Akasvayu reaccionó de la mano de dos actores secundarios como Vroman y Stevenson, que intentaron paliar el día gris que estaba teniendo Marc Gasol, y llegó al descanso ganando de un punto, 45 a 44.

Pero fue entonces cuando apareció la bestia madridista, el rodillo del último mes que se dedica a presionar a toda cancha, que pelea por todos los rebotes tanto en su aro como en el rival, y que es una apisonadora en ataque, tanto posicional como en transición. El cuadro blanco consiguió un parcial de 12 a 23, en el tercer cuarto y mas concretamente de 2-17 en los últimos 5 minutos de este mismo período, logró una diferencia de 10 puntos con el 57-67, gracias a la buena tarea de la zona defensiva impuesta por Joan Plaza y dejó casi sentenciado el choque.

Partido roto

El partido quedó absolutamente roto después de que en el minuto tres del último cuarto la diferencia subiera hasta los dieciséis puntos (62-78).

El resto del tiempo no sirvió para que los gerundenses forzaran un final apretado, ya que los visitantes supieron aminorar el ritmo del encuentro, llevarlo a su terreno y cerrar un choque que apriori podía parecer trampa pero que le confirma como el más firme candidato a volver a ganar el título de ACB.