Ruinas
Antena 3 ha estrenado un reality show social-inmobiliario que se llama Esta casa era una ruina y que conduce Jorge Fernández. Como se ha dicho por ahí, es una versión inmueble de Cambio radical que ha conocido un éxito importante en Alemania y en Estados Unidos. Aquí llega en el prime time del lunes, terreno arisco por la fortaleza inconmovible de CSI y por la cuota fija de Mira quién baila, pero no lo veremos todas las semanas, sino salteado y según, porque el titular de la plaza sigue siendo La familia Mata. La cosa consiste en lo siguiente: una familia en situación precaria pide socorro al programa; Jorge Fernández y sus muchachos acuden al lugar, nos presentan a la familia protagonista y nos muestran las pésimas condiciones en que ésta vive; acto seguido, a la familia le dan unos días de vacaciones y, mientras tanto, el equipo del programa derriba la casa y construye otra en perfectas condiciones de habitabilidad. El programa tiene un discurso francamente raro. Lo podemos resumir así: hay gente que sufre porque vive muy mal; somos tan buenos que les vamos a dar una casa mejor; para manifestar nuestro sentido de la justicia, emplearemos largos minutos en demoler a conciencia la chabola, levantando fiel acta de cuantas violencias sean precisas para reducirla a polvo.
Actualizado:Uno no sabe si el espectáculo está en el ternurismo, es decir, en la pena que dan los elegidos, o en el nihilismo, es decir, en la destrucción de la infravivienda. Aunque, en realidad, todos sabemos dónde se halla: en la alternancia rápida de sentimentalismo y furia, argumentos simples y directos que todo el mundo entiende y cuya sucesión surte el efecto de una ducha escocesa. El espectador al ver cómo Jorge Fernández la emprende a patadas y golpes con la chabola es semejante a la que, en el cine, nos empuja a aplaudir cuando el héroe vengador surge en escena cortando las cabezas de los malos. Aquí el mal es la vida miserable de los protagonistas, el héroe vengador es Jorge Fernández y la venganza consiste en destruir la vida vieja. Por el momento, a Antena 3 la apuesta le ha salido muy bien: 19,9% de share y más de 3,6 millones de espectadores.