MUNDO

El nuevo presidente de Guatemala deberá buscar alianzas para gobernar

Pese a ser duramente criticado por la descomposición institucional, el desorden administrativo y la escalada de la violencia, la Administración del presidente guatemalteco saliente, Óscar Berger, marcará las grandes líneas a seguir por su sucesor, que ayer se decidía en las urnas entre el general retirado Otto Pérez Molina y el empresario Álvaro Colom. Aunque ambos candidatos representan opciones conservadoras y socialdemócratas, sus programas difieren más en la forma que en el fondo. La necesidad de forjar pactos en el Congreso, donde ninguno tiene mayoría, limitará sus márgenes de maniobra.

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El Tribunal Supremo Electoral señaló que los más de 2.000 colegios electorales repartidos por el país abrieron con normalidad. Casi seis de los trece millones de guatemaltecos podían votar.

Las encuestas daban una ligera ventaja a Pérez Molina, del Partido Patriota. Las denuncias realizadas por Colom en las últimas horas respecto a supuestas irregularidades eran interpretadas por los analistas como vendas antes de la herida que le supondría perder, por tercera vez, unos comicios a la Presidencia.

El ex militar ha centrado su discurso en la seguridad y el libre mercado, pero no ha hecho hincapié en la principal propuesta de Colom: la satisfacción de las demandas sociales.