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Al menos 33 muertos en un incendio intencionado en una cárcel de Argentina
Presos de dos pabellones del penal quemaron colchones dentro de las celdas como medida de protesta
BUENOS AIRES Actualizado: GuardarUn juez ha prometido que investigará "hasta las últimas consecuencias" la muerte de por lo menos 33 presos que se amotinaron y desataron un incendio en el penal de la ciudad argentina de Santiago del Estero, que ya fue controlado por las autoridades.
"Están todos muy bien de salud, he recorrido todo el penal y hablé con todos, esto es lo que ellos quieren que les diga", dijo el juez Ramón Tarchini frente a un tumulto de familiares de reclusos que a los gritos le exigieron "justicia" y garantías de que no habrá "más represión".
El fiscal que lleva adelante la investigación, Cristian Vittar, confirmó que 33 reclusos murieron en la tragedia ocurrida al anochecer del domingo y fuentes policiales cifraron en una treintena los heridos, de los cuales nueve están en grave estado. El Gobierno argentino anunció el envío de una comisión a Santiago del Estero para colaborar en la atención de los familiares de las víctimas.
Otras fuentes judiciales admitieron que el presidio, que albergaba a 480 reclusos, "es un edificio obsoleto" que "está al límite" de su capacidad, mientras que abogados de los presos afirmaron que el trato a los detenidos "es inhumano".
La Policía retoma el control
La policía aseguró que ha retomado el control del presidio de Santiago del Estero, capital de la provincia homónima, a 1.150 kilómetros al noreste de Buenos Aires, después de algunos otros incidentes ocurridos hoy.
En un momento de la protesta, por una de las ventanas del penal se vieron llamas que provenían de un colchón y sábanas a las que los reclusos prendieron fuego y que fue apagado por una dotación de bomberos que permanece en el penal con extintores y tubos de oxígeno.
"No hay ningún tipo de represión desde la noche del domingo", cuando se sofocó el incendio que habían desatado los amotinados, afirmó Tarchini, luego de subrayar que están dadas "todas las garantías" para los reclusos. El juez aseguró a los periodistas que está "todo tranquilo" dentro del penal, donde, según indicó, "la mayoría" de los reclusos está "bajo proceso o sin condena en firme".
Las familias de los presos protestan
La tragedia se desató el domingo por la tarde, luego del horario de visitas, cuando se amotinaron 42 detenidos en uno de los pabellones y causaron un incendio del que no pudieron escapar por haber bloqueado el acceso al lugar, según las autoridades penitenciarias.
Unos 200 familiares de reclusos permanecen protestando a las puertas del penal, donde prendieron fuego a neumáticos y acusaron de "asesinos" a los jefes del servicio penitenciario provincial, quienes insisten en que el motín e incendio fue parte de un intento de fuga.
Un grupo de reclusos difundió una carta en la que explicó que el motín se inició por la represión de los guardias ante un reclamo y negó la versión del intento de fuga frustrado.
Murieron por inhalación de humo
Fuentes de la policía de Santiago del Estero señalaron que la mayoría de las víctimas murió por la inhalación de los gases tóxicos que produce la combustión de los colchones. Pero no informaron si hubo detenidos durante los enfrentamientos que la policía mantuvo con familiares de los reclusos que pugnaron por entrar al presidio cuando estalló el motín.
El abogado Diego Lindau, quien defiende a varios reclusos, recordó que el 70 por ciento de los detenidos en el sistema penitenciario argentino está bajo proceso o sin condena firme por la lentitud de la justicia. En declaraciones a radios de Buenos Aires, el abogado sostuvo que en el penal de Santiago del Estero hay "hacinamiento" y un trato "inhumano", entre otras cosas, porque "se sirve comida imposible de comer".