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Sarkozy se apunta un éxito diplomático al traer de Chad a las cuatro azafatas españolas
Las mujeres regresaron en un avión con el líder francés, cuyas gestiones en el país africano fueron claves Otros tres tripulantes permanecen detenidos por la investigación de un presunto tráfico de menores
Actualizado: GuardarEl presidente francés, Nicolas Sarkozy, se apuntó ayer un éxito diplomático al lograr la excarcelación de los tres periodistas de su país y de las cuatro azafatas españolas acusados en Chad del secuestro de 103 menores. La sobrecargo Tatiana Suárez y las auxiliares de vuelo Carolina Jean, Mercedes Calleja y Sara López ya se encuentran en suelo español. Las cuatro azafatas, que estaban detenidas en Chad desde hace diez días por el caso de la ONG Arca de Zoé, que pretendía trasladar a Francia a 103 niños del país africano, fueron liberadas ayer gracias a las gestiones cruciales efectuadas por el presidente galo. Las mujeres volaron junto al jefe del Ejecutivo francés en un avión que tenía como destino final París, pero que hizo una escala previa en Madrid para que desembarcaran en territorio español.
Sarkozy efectuó un viaje relámpago de un par de horas a Yamena, del que había informado previamente al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. En la capital chadiana permaneció cerca de dos horas, con la intención de estudiar la situación de los detenidos con su homólogo de Chad, Idriss Deby, e intentar conseguir la liberación de algunas de las personas arrestadas.
Tres españoles continúan presos en el país africano. Se trata del comandante Agustín Rey, el copiloto Sergio Muñoz y el sobrecargo Daniel González. El secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Bernardino León, expresó su esperanza de que el sobrecargo Daniel González sea puesto en libertad hoy, tras declarar ante el juez.
Coordinación con Madrid
La iniciativa de Sarkozy se ha producido tras una estrecha coordinación entre Madrid y París. El presidente galo destacó ayer que las gestiones para la liberación de las azafatas son fruto del trabajo «mano con mano» realizado con el Gobierno español para «encontrar una salida a esta situación lamentable». «Zapatero conocía todas las iniciativas que he tomado», confirmó Sarkozy con varios miembros de la tripulación española y con los tres periodistas franceses también arrestados por el caso.
Las gestiones de Sarkozy -que fue recibido por Idriss Deby en el aeropuerto de la capital chadiana a primeras horas de la tarde de ayer- surtieron efecto, al menos parcialmente, ya que poco después el juez de instrucción de Chad decretó el levantamiento del mandato de detención y ordenó la liberación de las cuatro azafatas españolas y los tres periodistas franceses, «conforme a los artículos 248 y 249 del código de procedimiento penal». Así lo anunció el abogado de los periodistas, Jean-Bernard Padaré. Los informadores franceses son Marc Garmirian, Jean-Daniel Guillouy Maria Agnès Peleran.
Secuestro de niños
Las azafatas españolas, junto a los tres periodistas galos, fueron a buscar sus efectos personales al Palacio de Justicia de Yamena y, acto seguido, viajaron al aeropuerto de la capital del país africano para dirigirse de inmediato con destino a París. El avión militar francés que les esperaba despegó del aeropuerto de la capital chadiana a las 16.10 hora local.
Diecisiete europeos-los tres periodistas franceses, seis miembros galos de la organización Arca de Zoé, los siete tripulantes del avión español que debía transportar a los niños a Francia desde Chad, y un piloto belga-, así como cuatro responsables locales de Chad, estaban inicialmente inculpados y arrestados en Yamena por «secuestro de niños», «estafa» o «complicidad».
El desplazamiento sorpresa de Sarkozy a Chad marcó un giro en el caso de la tentativa de la ONG francesa de traer a Francia desde Chad a 103 niños de la región, en una operación que fue impedida el 25 de octubre por las autoridades chadianas en la ciudad de Abeché (este del país). Después se demostró que la inmensa mayoría de los menores tenían padres o familiares directos.
Juzgados en Francia
Poco antes de partir con destino a París, Nicolas Sarkozy dijo en Yamena que su deseo es que los franceses de El Arca de Zoé detenidos en el Chad sean juzgados en Francia. Durante una conferencia de prensa conjunta con su homólogo chadiano, Idriss Deby, agradeció su gesto y le transmitió su amistad y reconocimiento, aunque expresó su deseo de que los franceses inculpados sean juzgados en su país.
Tras desear que no se confunda «la acción notable de las ONG en general y lo que ha pasado con esta asociación que ha actuado tan mal», el presidente francés aseguró que «esta expedición bastante lamentable no tiene nada que ver con el despliegue de la fuerza europea en Chad en la frontera con Sudán». Observadores especializados en las relaciones franco africanas habían apreciado en la escalada verbal de las autoridades chadianas un intento de utilizar el caso para reforzar su posición ante la opinión pública de cara al futuro despliegue de la Eufor en la frontera con la región sudanesa de Darfur.
Los acusados en el caso que invesetigan la autoridades chadianas se enfrentan a penas de entre cinco a 25 años de trabajos forzados si son reconocidos culpables.