El Gordo llegó en otoño

Los muros de la administración de lotería de la avenida Reyes Católicos están habituados a constatar cómo a muchos se les cuela la fortuna en los bolsillos al saber combinar los números para no tener que volver a hacerlos el resto de sus vidas o, al menos, durante un largo periodo de tiempo.

El sorteo de La Primitiva celebrado el jueves por el que alguien ganó 1.335.545,80 euros ha sido el mayor premio que ha salido por la puerta de este despacho, pero no el único, puesto que su dueña, Laura González, ha visto cómo la suerte de uno de sus clientes se traducía en 841.416 euros y cómo la Quiniela tampoco se quedaba atrás y en diciembre del pasado año resultaba ganadora una persona con 601.012 euros.

«Estoy muy contenta de que uno de mis clientes haya ganado esta gran cantidad de euros, pero lo estaría más si los hubiese ganado yo», comentaba ayer Laura, que asegura que ha habido muchas ocasiones en que ha sido ella misma la que le ha dicho al agraciado que era millonario debido a que hay personas que no miran el boleto hasta que no van a la administración.

En la mañana de ayer Laura no tenía conocimiento de quién se había hecho con tan suculento premio, pero estaba segura de que si se daba el caso de que ella misma tuviera que darle la noticia «a buen seguro tendría que recogerlo del suelo del desmayo, al menos, a mi me ocurriría».