Acusan a IVG Galvanizados de contratar a ilegalmente a varios inmigrantes polacos

Miembros del sindicato UGT se concentraron ayer a las puertas de la empresa IVG Galvanizados, situada en la Ciudad del Transporte, con la intención de denunciar ante la opinión pública las «pésimas» condiciones de trabajo que soporta la plantilla de empleados de esta fábrica, y el despido de cuatro de ellos sin motivos aparentes.

Así, el secretario local de UGT en Jerez, Pedro Alemán, aseguró que la empresa ha puesto en la calle a estos cuatro trabajadores al tiempo que ha contratado a una docena de inmigrantes polacos «que son más dóciles y no reivindican sus derechos».

Alemán añadió que la mitad de la plantilla, formada por unas 45 personas, está compuesta ya por personas inmigrantes, la mayoría procedente de países del Este como Polonia, y aseguró que van a llevar el caso a la Inspección de Trabajo pues «dudamos de la legalidad de los contratos» realizados a este colectivo. El líder de UGT en Jerez denunció, por otro lado, que los inmigrantes están haciendo una cantidad de horas extras que «sobrepasa el tope legal». Los sindicalistas volverán a concentrarse el lunes, mientras que la empresa, a preguntas de esta redacción, declinó hacer cualquier valoración al respecto.