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«El caballo te sorprende cada día por su enorme inteligencia »
Este jerezano se acaba de proclamar campeón de España de Doma de Alta Escuela, título que se suma a sus dos coronas andaluzas
Actualizado: Guardar-¿Cómo comenzó su andadura en el mundo de la hípica?
-De la forma que suelen empezar todos los jinetes, de niño y con mucha ilusión. Mi padre me regaló mi primera yegua a los 9 años y a los 16 entré en la Escuela Andaluza de Arte Ecuestre en la que permanecí 5 años. Cuando terminé allí nos juntamos un grupo de jinetes jóvenes y formamos el proyecto de Equitación Mágica, con el que damos espectáculos ecuestres.
-¿Qué características reúne la doma de alta escuela?
-Es una forma de recuperar la equitación antigua que con el paso de los años se ha ido dejando un poco de lado. Aquí tenemos al caballo español que por su carácter es el ideal y buscamos con él la disciplina y la perfección del animal.
-¿Si tuviera que definir al caballo como animal de que forma lo haría?
-Como decían los antiguos es un noble bruto, aunque de brutos quizá tengan menos que nosotros. Es un animal que te sorprende cada día por su enorme inteligencia.
-¿Cuál es su método de trabajo con los caballos?
-Lo ideal es trabajar todos los días entre media y una hora al día pero eso depende del ánimo que tenga en ese momento el caballo. El objetivo es mantenerlo en forma y usar mucha psicología para que aprenda lo que quieres enseñarle porque hay que tener en cuenta que no es un animal que haya nacido para ser montado.
-La paciencia será entonces fundamental en todo buen jinete...
-Sin duda, es la primera virtud que debe tener un buen jinete. Los caballos no hablan por eso la persona que lo tenga a su cargo debe de mostrar mucha sensibilidad para conocerlo. Además, mientras que le enseñas cosas nuevas debes seguir insistiendo en la antiguas para que no las deje de lado porque a veces sube un peldaño pero puede bajar dos. Y siempre hay que tener en cuenta que el caballo, cuanto más sabe, más pícaro se vuelve.