Bush acusa al Congreso de pasividad ante el terrorismo
"Desgraciadamente, en demasiados temas, el Congreso se está comportando como si EEUU no estuviera en guerra"
WASHINGTONActualizado:El presidente de EEUU, George W. Bush, ha acusado al Congreso de obstruir algunas de sus medidas para la lucha antiterrorista y ha afirmado que dicha inacción es similar a la que permitió el ascenso de Vladimir Lenin y Adolf Hitler. En un discurso ante el centro conservador de estudios "Heritage Foundation" de la capital estadounidense, Bush ha señalado que entonces "el mundo pagó un precio muy alto".
Bush ha adverido de que algo similar puede volver a ocurrir si el Congreso no aprueba una serie de medidas que, en su opinión, son necesarias para la guerra contra el terrorismo.
Entre esas medidas se encuentra el retraso en la confirmación del que sería el nuevo secretario general de Justicia de EEUU, Michael Mukasey, y la aprobación de los presupuestos para las guerras de Irak y Afganistán. "Desgraciadamente, en demasiados temas, el Congreso se está comportando como si EEUU no estuviera en guerra", ha indicado el presidente.
Busca apoyo para "su fiscal"
"No es el momento de que Congreso debilite al Departamento de Justicia, denegándole un líder fuerte y efectivo", ha dicho Bush, quien ha añadido que tampoco es el momento de que dicho órgano legislativo "debilite nuestra capacidad para interceptar información de los terroristas o que paralice financiación vital para nuestras tropas en su lucha contra Al Qaeda".
Por otro lado, ha argumentado que el actual debate sobre Irak y los métodos de su Gobierno en la lucha contra el terrorismo rememoran las campañas de Lenin y Hitler. "Ahora estamos al comienzo de un siglo nuevo y se ha revelado un nuevo debate, esta vez en relación a mi política en Oriente Medio. Una vez más las voces en Washington argumentan que la consigna clave de esta política debiera ser la estabilidad", ha agregado.
Bush también ha asegurado que negar que estamos en guerra es "peligroso" y ha subrayado que la historia ha demostrado que "subestimar las palabras de personajes malvados y ambiciosos es un terrible error". "Bin Laden y sus aliados terroristas han dejado bien claras sus intenciones al igual que lo hicieron Lenin y Hitler antes que ellos. Y la pregunta es ¿escucharemos?", ha concluido Bush.
Los senadores lanzan advertencias
Decenas de líderes demócratas del Senado de EE.UU. han afirmado que el presidente George W. Bush necesitará el "consentimiento explícito" del Congreso si decide tomar una acción militar contra Irán. Un total de 30 líderes demócratas del Senado han enviado una carta al presidente Bush, en la que manifiestan su preocupación porque la "retórica cada vez más agresiva ha minado los esfuerzos diplomáticos con Irán".
Los comentarios de la Administración Bush sobre una posible acción militar contra Irán "son contraproducentes y minan los esfuerzos por resolver las tensiones con Irán a través de la diplomacia", indican en la misiva.