Empresarios exigen a la Junta concretar el desdoble de la Algodonales-Antequera

Tras la adjudicación hace unos días del estudio informativo del desdoble de la carretera Arcos-Algodonales, los empresarios y transportistas quieren que la Junta que complete su apuesta de mejora de la conexión de la Sierra con la A-92 (Sevilla-Granada) y diga qué va a hacer con el tramo restante entre Algodonales y Antequera. De momento, la memoria del proyecto de presupuestos para el próximo año de la Consejería de Obras Públicas contempla el estudio de la Arcos-Algodonales, que se prolongará durante 24 meses, pero no hace mención al que transcurriría por la provincia malagueña, sobre el que la Junta guarda silencio.

El presidente de la Cámara de Comercio, Ángel Juan Pascual, resume la situación: «El desdoble de la Arcos-Antequera es importantísimo para el desarrollo de la Sierra, porque supone abrir las comunicaciones con Granada, Málaga y Córdoba sin tener que dar la vuelta por Utrera, como hasta ahora. Y llevamos muchísimo tiempo pidiéndola». Hasta hace muy poco y antes de poner en funcionamiento el desdoble entre Jerez y Arcos, la posición de la Consejería era que se estudiaría continuar la duplicación «en función de los tráficos», dando a entender que éstos no eran suficientes para la conversión de una vía convencional en una de alta capacidad. «Pero nosotros siempre hemos insistido en la idea inversa, que si esta vía tiene poco tráfico es porque es muy complicada para el tráfico pesado. Si se mejorara, si hubiera una buena oferta, la demanda de circulación sería enorme», razona Pascual.

Y pone un ejemplo: «Con la nueva autovía hasta Arcos, y en un día con poco tráfico, te puedes plantar en Espera desde Cádiz en 30 minutos. Esto antes era imposible. Si duplicas la Arcos-Antequera, el efecto dinamizador para toda la economía de la zona será enorme», continúa el presidente de la Cámara. Por ello, además de pedir que se duplique el tramo Algodonales-Antequera, también pide la agilización de las obras entre Arcos y Algodonales. «Si el estudio tarda dos años, más luego anteproyecto, proyecto, nos podemos ir a nueve años. Tiene que ser más rápido», pide Pascual.

Similar opinión tiene el presidente de la Asociación de Transportistas de Cádiz, Antonio Gutiérrez. «La Arcos-Antequera es una de nuestras reivindicaciones históricas, junto con la mejora de la N-IV. Ahora mismo se trata de una carretera poco utilizada por los camiones porque tiene tramos peligrosos y muy sinuosos, sobre todo a partir de Olvera», recuerda Gutiérrez. Pese a todo, matiza que la Arcos-Antequera «no es la solución definitiva, sino que debe ser una alternativa más», pero tiene claro que la apertura de la Jerez-Arcos ha mejorado «muchísimo» el tráfico con destino a la Sierra. «Nosotros tenemos un problema añadido, que son los tacógrafos, que nos limitan mucho la velocidad y el recorrido, por eso necesitamos alternativas que realmente compensen», a la hora de conectar con la A-92, explica.

El tramo cuyo estudio informativo ha adjudicado la Consejería de Obras Públicas abarca 43 kilómetros entre Arcos y Algodonales y el plazo de adjudicación ha sido de 24 meses. Obras Públicas lo presenta como una de las novedades importantes dentro de su objetivo número cinco de los presupuestos para 2008 -completar la Red de Gran Capacidad de Carreteras-. Sin embargo, el futuro de la Algodonales-Antequera, que debería ser continuación natural del tramo anterior -se trata de la misma carretera- exigiría un esfuerzo mucho mayor: son casi el doble de kilómetros, 93, incluyendo los tramos en la provincia malagueña. La pelota está en el tejado de la Consejería.

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