![](/RC/200710/26/Media/M1-1793593955--253x190.jpg?uuid=06cba0ac-83ed-11dc-baf6-5fae91eabd36)
El Príncipe aboga por «seguir trabajando todos juntos»
El Príncipe Felipe ha entregado los premios Príncipe de Asturias en un emotivo acto en el que ha recordado a Umbral
OVIEDO Actualizado: GuardarEl Príncipe de Asturias ha abogado por "seguir trabajando todos unidos" en esa gran empresa "que es España, una sociedad cada vez más sólida y cohesionada en torno a los principios y valores de la Constitución", a lo que dedica y dedicará "todos" sus "esfuerzos como Heredero de la Corona".
Con estas palabras, Don Felipe ha puesto fin a la ceremonia de entrega de la XXVII edición de los Premios que llevan su nombre y que ha presidido acompañado de la Princesa de Asturias. El Príncipe ha manifestado que los premiados son un ejemplo de que "se puede convivir en la diferencia" y considerar "su propia diversidad como una fuente de enriquecimiento mutuo".
Los premiados representan, por encima de todo, "la lucha por los Derechos Fundamentales", especialmente por el de la vida y da la dignidad de las personas. Son "defensores de la libertad y de los valores democráticos", ha subrayado el Príncipe .
Don Felipe ha destacado que esos valores son, en definitiva, el ejemplo de lo que "también los españoles nos propusimos hace treinta años para nuestro país y que seguimos construyendo para las futuras generaciones".
Emotivo recuerdo a Umbral
El Príncipe ha iniciado su disertación con un recuerdo al recientemente fallecido escritor y periodista Francisco Umbral cuando dijo en este mismo escenario que estos Premios son el triunfo del bien y de la cultura, ese saber del hombre sobre el hombre.
Los Premios, ha proseguido, ensalzan valores que el paso del tiempo y las modas nunca lograrán vencer, porque dignifican y engrandecen nuestras vidas.
El Premio de Cooperación a Al Gore, ha dicho el Príncipe, es un reconocimiento a las acciones para la preservación del medio ambiente, y por difundir la preocupación -cada vez más extendida- de que "el cambio climático es una de las amenazas a las cuales los seres humanos debemos enfrentarnos con decisión y urgencia" y globalmente.
Ausencia de Bob Dylan
De Robert Allen Zimmerman, mundialmente conocido como Bob Dylan, Premio de las Artes, que no ha podido venir a recoger el Premio de las Artes, ha mencionado la insobornable esperanza de este músico austero, su sensibilidad y la fortaleza de sus sueños.
Al hablar de los dos biólogos, reconocidos con el galardón de Investigación Científica y Técnica, el británico Peter Lawrence y el español Ginés Morata, ha destacado Don Felipe su trabajo sobre el último misterio de la vida, convencidos de las posibilidades actuales para llegar a entender la programación de lo vivo y, desde ahí, las alteraciones que separan la salud de la enfermedad, la vida de la muerte.
Del israelí Amos Oz, vencedor en la categoría de Letras, ha señalado que "abrir sus libros es quedar atrapado" en una literatura auténtica y ha destacado su compromiso con la realidad más inmediata, que es la de su país, Israel, y lo que su historia y su situación actual representan y nos dice que "el fanatismo es la plaga más perversa".
En cuanto a las revistas Nature y Science, Premio de Comunicación y Humanidades, ha indicado su capacidad para transmitir las investigaciones, ante la dificultad de que llegue a la sociedad una información entendible, veraz y rigurosa.
Del sociólogo anglo-alemán Ralf Dahrendorf, cuya esposa Christiane ha recibido el Premio de Ciencias Sociales por encontrarse convaleciente de una operación, ha comentado su compromiso con la libertad y la democracia, y le ha definido como una gran defensor de Europa; la de la convivencia y el diálogo.
Schumacher, ejemplo de profesionalidad y constancia
Ha ensalzado también al heptacampeón del mundo de Fórmula UNO y Premio de los Deportes, Michael Schumacher, ejemplo para los jóvenes de una vida profesional y de las altas cotas a las que puede llegar la constancia humana.
Las últimas referencias a los premiados han sido para los directores del Museo del Holocausto de Jerusalén y los supervivientes del genocidio que han venido hoy hasta Oviedo para recibir el Premio de la Concordia.
Un homenaje que, ha puntualizado Don Felipe, nos permite expresar el respeto, reconocimiento y afecto a los millones de víctimas inocentes del Holocausto, a tantos hombres, mujeres y niños cruelmente perseguidos y exterminados", que nunca nos dejarán de conmover y que simbolizan "el compromiso que todos tenemos contraído con los derechos humanos, con la libertad del hombre y con su inalienable dignidad