Enrique no ve fácil repetir su gran momento de inicio de Liga

De Enrique se recuerda en el Cádiz tres momentos brillantes. La primera llegó con el ascenso a Primera tras enseñarle a Dani Navarrete la puerta de su ocaso. La segunda fue al comienzo de la Liga en Primera. Y la tercera comenzó a final de la temporada pasada continuando con el comienzo de la presente hasta que una maldita lesión en Vitoria se cruzó en su camino.

El extremeño es consciente de que llegar a esa forma en la que se conjuga a la perfección el estado anímico con el físico es harto complicado. Por ello, y a sabiendas que no resulta fácil, apela al trabajo para acercarse a ello. «El momento en el que me encontraba a principios de temporada viene muy pocas veces y tuve la desgracia de lesionarme», comentaba ayer. Con tesón, Enrique asegura que «voy a trabajar para acercarme lo más posible a ese momento» aunque «es muy difícil pero espero tener otro golpe de suerte para disfrutarlo otra vez».

Malos momentos

Y si acaba de pasar -antes de la lesión en Mendizorroza- por uno de sus mejores momentos a nivel personal no puede decir lo mismo de la entidad. «La verdad es que desde que llegué todo han sido buenos momentos», dijo recordando «una buena campaña en Segunda, un ascenso a Primera, un papel digno en la Liga de las Estrellas y salvo el año pasado que fue atípico todo ha ido bien», dijo. Para resumir la crisis por la que está pasando la institución, el extremeño manifestó que «están pasando demasiadas cosas en poco tiempo y, para colmo, se está juntando todo». Lamentó que con «la buena repercusión nacional que tiene el Cádiz no se esté dando la imagen que se espera de un club como éste». «Esperemos que se arregle pronto por el bien del club, de la ciudad y de la afición», dijo. Por último, dice sentirse bien para jugar como titular aunque respetará la decisión que tome el entrenador.