REFERENTE. Una eminencia en técnicas arquitectónicas. / A. V.
Cultura

Rafael Manzano ensalza las construcciones islámicas como «arte fino y cualificado»

El arquitecto gaditano diseccionó ayer los orígenes de las mezquitas Defendió que «España es diferente por la aportación cultural musulmana»

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Cuando la mayor parte de Europa vivía sumida en las tinieblas del medievo, repartiéndose los restos del naufragio del Imperio Romano, avezada sólo en la práctica de una cultura icónica opaca, simple y continuista, que no levantaría cabeza hasta el Renacimiento -salvo contadísimas excepciones-, comenzó en Al-Andalus la construcción del que, para el arquitecto Rafael Manzano, es el edificio más importante de la Historia de España: la mezquita de Córdoba.

El prestigioso investigador, un referente nacional en la divulgación de las técnicas y prototipos constructivos de civilizaciones antiguas, impartió ayer una magnífica conferencia en el Aula Magna de la Facultad de Filosofía y Letras de la UCA, organizada por el Colegio de Arquitectos de la ciudad, en la diseccionó, con un estilo ágil aunque académico, los orígenes de las mezquitas, y defendió el arte islámico como «la gran particularidad de nuestra cultura, lo que verdaderamente nos ha hecho diferentes y ha enriquecido de una forma esencial nuestra forma de entender la sociedad y la vida».

Manzano reconoció que «como todo buen gaditano me enamoré de lo que tenía cerca (el mar), pero también de lo que me quedaba lejos (las montañas) así que, desde que conocí Granada, me empeñé en aprender todo lo posible sobre la ciudad y sobre el arte y el patrimonio que nos legaron los musulmanes». Con el bagaje que dan años de sumergirse en la materia, el arquitecto explicó cómo las mezquitas se levantaban «tomando como referencias algunos principios fundamentales: la utilización de columnas, la presunta orientación hacia La Meca, y el principio incuestionable del cerramiento (que determinaba lo que era terreno sagrado y lo que no)».

Sin duda, uno de los aspectos más curiosos de su intervención fue el relativo a la presunta disposición de la planta hacia la ciudad sagrada: «El 99% de las mezquitas que hay en España, salvo quizá la de Medina Zahara, no están correctamente orientadas, ya que sus constructores procedían de Siria e importaron la costumbre de situarlas mirando al Sur, a pesar de que era erróneo».

Manzano ilustró a los presentes con la diferencia entre dos clases de mezquita: las congregacionales y las centrípetas, en las que toda la estructura gira en torno a un núcleo matriz, como es el caso de la Kaaba.

Sobre las columnas se tendían los arcos o dinteles de madera, vigas de cinco o seis metros que corrían paralelas al muro del fondo, que marcaba la orientación. «Era lo mejor que se podía hacer con los sistemas disponibles, un tipo de construcción que es, en sí misma, una forma de arte preciosista, fino y cualificado, y que hay que entender como uno de los grandes valores que cimientan nuestra exuberancia cultural».

Manzano también brindó a la concurrencia diversos ejemplos de interrelación entre fórmulas constructivas procedentes de estilos arquitectónicos distintos, como la influencia del arco del acueducto romano en las técnicas islámicas aplicadas a los edificios religiosos. dperez@lavozdigital.es