Unas 100 personas irán a Roma con los obispados de Cádiz y Jerez a la beatificación de los mártires de España

Unas cien personas irán hasta Roma en las peregrinaciones organizadas por el Obispado de Cádiz y Ceuta y el Obispado de Asidonia-Jerez para asistir a los actos de beatificación de los mártires del siglo XX en España, que se celebrará el próximo domingo día 28.

Según indicaron a Europa Press ambas diócesis, por el Obispado de Cádiz y Ceuta acudirán unas 40 personas, que asistirán al acto de beatificación y a la misa de acción de gracias que se celebra al día siguiente, mientras que por el Obispado de Asidonia Jerez acudirá un grupo de 56 personas, encabezado por el obispo de la Diócesis, Juan del Río.

En una carta pastoral, el obispo Juan del Río recuerda que a los 498 mártires "que dieron su vida por Cristo entre los años 1934 y 1939" que se beatificarán el próximo domingo, hay que sumar que desde 1987 ya fueron beatificados 479 más, de los cuales once ya alcanzaron el reconocimiento de santos.

Asimismo, indicó que los 498 mártires, entre los que se encuentran sacerdotes y aspirantes al sacerdocio, religiosos y religiosos, y miembros del laicado la mayoría casados, ancianos, adultos y jóvenes, "son un ramillete de verdaderos mártires que, llegada la hora de la tribulación, confesaron ante los hombres a Cristo, el cual ha prometido que confesará ante el Padre a quienes lo confiesen ante loshombres".

Además, recordó que la Iglesia "siempre que beatifica o canoniza a un siervo o una sierva de Dios quiere no solamente honrar su memoria y solicitar su valiosa intercesión bajo Cristo y con Cristo ante el Padre sino también proponer su ejemplo de fe intrépida y entregagenerosa, para que los cristianos de hoy se animen a vivir la fe deforma coherente, comprometida y radical".

Del Río señala en su carta pastoral que "la mirada a los mártires debe suscitar el empeño de un cristianismo vivido al máximo, dando testimonio -eso significa martirio - de Dios en este mundo laicistay ateo, que olvida los valores supremos y la trascendencia del hombre y quiere que Dios sea olvidado y que ni siquiera los creyentes se atrevan en la sociedad secularizada a hablar de El".