Talento y carácter
Con tan sólo 20 años, Lorenzo llegará la próxima temporada a MotoGP con dos títulos en el cuarto de litro y la vitola de sucesor de Rossi
Actualizado: GuardarLa historia de Jorge Lorenzo es una historia de precocidad, porque a los tres años disputó su primera carrera de minicross. Desde entonces nunca se ha detenido, a menudo acompañado por su padre, cuya pasión por el motociclismo fue fundamental en la carrera de Jorge. Aunque la relación paterno-filial se llegó a romper en algunos momentos, el piloto mallorquín demostró su madurez en Malasia, al dedicar sus primeras palabras de agradecimiento a su familia.
Tiene sólo 20 años, cuenta con un palmarés impresionante y un carácter que siempre ha dado bastante que hablar, al igual que sus particulares celebraciones, que muchos han considerado un intento de copiar al genuino Heptacampeón del Mundo Valentino Rossi.
Lo cierto es que Lorenzo tiene un talento impresionante para ir en moto y aunque su temperamento permanece intacto, es evidente que ha ido creciendo y lo seguirá haciendo. Tras ganar su segundo título mundial de 250cc, Jorge Lorenzo volvió a desplegar su ingenio en la celebración, pero tuvo que hacer un paréntesis en su actuación, porque no pudo evitar las lágrimas al recibir el abrazo del compañero y amigo que le sustituirá el próximo año, Alex Debón. Y es que a partir del próximo año correrá la categoría reina de Moto GP y como compañero de un piloto, que al igual que a él mismo, no le agrada en exceso compartir su box, el Dottore Rossi.
Pero ayer no era momento de pensar en el futuro sino de festejar el presente. «Estoy en una nube y muy contento. El equipo ha realizado un gran trabajo durante la temporada y se merecía también este título, al igual que mi familia, Aprilia y los aficionados españoles que me animan constantemente y me hacen cada día más fuerte. Ha sido mejor que el año pasado, ya que he sufrido un poco menos y he ganado el título antes de llegar a Valencia», señalaba el flamante bicampeón del mundo tras bajar del podio de Sepang. Con respecto a su celebración del título, en la que se vistió de campeón del mundo de boxeo emulando al cinematográfico Rocky Balboa, explicó que «tenía pensada hace tiempo la celebración, y espero que haya gustado a los aficionados. Se está cerrando ahora para mí una etapa en dos y medio que ha sido muy importante, con muchas satisfacciones, pero también con momentos duros. A comienzos de temporada me dije a mí mismo que tenía que recuperar la mirada del tigre, como Rocky Balboa en la famosa película y he decidido vestirme de púgil para celebrar este título, aunque lo celebraremos también en Valencia, con toda mi gente cerca y todos los aficionados españoles».