Un viaje a los fragmentos del pasado junto a La Abadía

Porque los recuerdos son algo arbitrario, porque la memoria es un saco absurdo del que uno nunca sabe qué sacará, el nuevo montaje del Teatro de La Abadía, Me acordaré de todos vosotros, es un paseo por un universo en retazos, por un paisaje de recuerdos sin orden ni concierto, en el que la voz de los poetas se funde con la de los actores para hablar de nuestra sensibilidad individual y colectiva.

Ana Vallés, que vuelve a La Abadía tras Historia natural (elogio del entusiasmo), la temporada pasada, planteará sobre el escenario de La Bomba un espectáculo con perfumes fellinianos, un trabajo de creación libre con actores del elenco del teatro que, sin partir de un texto previamente concebido, aspira a dar paso al inconsciente, a la imaginación del espectador, siguiendo una lógica asociativa en vez de narrativa, propia de los sueños.

Dejando a un lado los datos objetivos, esos que hablan de cómo nos llamamos, de cuándo, dónde y de quién nacimos, Me acordaré de todos vosotros habla de quiénes somos en lo que a nuestra identidad más profunda se refiere, esa para la que no existe objetividad sino fragmentos estratégicamente seleccionados de nuestro pasado. Porque estamos hechos de sueños, de fragmentos apenas enlazados de lo real, La Abadía propone escarbar lo más profundo de nuestra psique..