El ministro descarta otra regularización de inmigrantes
El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, afirmó ayer en Cádiz que la cifra de inmigrantes ilegales en España «ha bajado» mientras que la de repatriaciones «ha subido», por lo que descartó que el Gobierno vaya a emprender un nuevo proceso de regularización «como el que se tuvo que hacer, dado que hoy se controlan mucho mejor las fronteras».
Actualizado:Preguntado por el proyecto de ley sobre inmigración de Francia que plantea la regularización de aquellos inmigrantes que residan en territorio francés y puedan demostrar que tienen un puesto de trabajo, Rubalcaba optó por la prudencia a la hora de valorarlo. «Todos los países de Europa han hecho en algún momento un proceso de regularización», argumentó, y en España se llevó a cabo porque «existían más de medio millón de personas trabajando sin derechos ni deberes».
En este sentido, Rubalcaba subrayó que los esfuerzos del Ejecutivo se centran ahora en «controlar, con pasos ciertos, la inmigración», con medidas que «están dando buenos resultados», como las repatriaciones. «Las mafias deben saber que no pueden engañar a quienes traen ilegalmente a España, porque el que entra ilegalmente, lo más probable es que vuelva por donde entró», dijo.
Rubalcaba se refirió a los «buenos datos» que se están registrando en esta materia tanto en Canarias como en el Estrecho, por lo que concluyó que «el mejor control de las fronteras» descarta un proceso de regularización «como el que tuvimos que hacer porque el PP dejó entrar masivamente a un número importante de ilegales, que las cifras de la regularización atestiguan».
Kale borroka
Respecto a la segunda operación llevada a cabo contra la violencia callejera en el País Vasco, el ministro explicó que «se ha logrado desarticular un núcleo muy importante de kale borroka ahora en Vizcaya y antes en Álava». El Gobierno «seguirá persiguiendo a la kale borroka», ya que «es violencia y como tal debe ser perseguida». «En muchas ocasiones es el campo de entrenamiento, bien siniestro, de la banda terrorista ETA», sentenció.
En cuanto a la recusación de dos magistrados del Tribunal Constitucional por parte del Gobierno, el ministro lo consideró «un deber» plantear la recusación de los magistrados Roberto García-Calvo y Jorge Rodríguez-Zapata al considerar que «no eran parciales» para juzgar el recurso de inconstitucionalidad del PP contra la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial.