Bush impone la Medalla del Congreso al Dalai Lama pese a las advertencias del Gobierno chino
El Congreso de EE UU impuso ayer, de manos del presidente George W. Bush , la Medalla de Oro al Dalai Lama, en un acto que se convirtió en una llamada al diálogo entre China y el líder espiritual de los tibetanos.
Actualizado: GuardarDurante una solemne ceremonia en el Capitolio, Bush y los principales líderes demócratas y republicanos del Congreso aseguraron que esta condecoración civil es un reconocimiento a su incansable lucha por la libertad de culto y los derechos humanos.
La ceremonia, a la que asistieron al menos 500 personas, entre ellas el premio Nobel de la Paz Elie Wiesel, derivó en un acto político, en el que Bush y los legisladores condenaron la represión china contra el pueblo tibetano.
Al honrar la obra y figura del Dalai Lama, «Estados Unidos levanta su voz en pro de la libertad religiosa y los derechos humanos fundamentales», dijo Bush, quien se entrevistó en privado con el líder tibetano el martes en la Casa Blanca.
«Los estadounidenses no pueden ver la situación de los oprimidos por su religión, ce-rrar los ojos o darles la espalda. Y es por eso que yo seguiré urgiendo a los líderes de China a que reciban al Dalai Lama» en ese país, enfatizó el mandatario, que ha sido el primer presidente de EEUU en aparecer en público con el líder religioso.
Las autoridades chinas se darán cuenta «de que este buen hombre es un hombre de paz y reconciliación», agregó Bush , haciéndose eco de la justificación que ofreció a la prensa en la mañana sobre su participación en la ceremonia. El décimocuarto Dalai Lama, que de niño demostró una fascinación por las ciencias, ya recibió un reloj de oro de manos del presidente Franklin Delano Roosevelt (1933-1945).
Ayer sumó a su premio Nobel de la Paz, diplomas honorarios y otros premios mundiales, la Medalla de Oro que le impuso Bush , y que supone la más alta condecoración civil que otorga el Congreso. Flanqueado por estatuas del general Ulysses Grant y Abraham Lincoln, el Dalai Lama, cuyo nombre de pila es Tenzin Gyatso, agradeció el apoyo de EEUU a su causa y aseguró que su intención no es otra que lograr la autonomía religiosa y cultural de seis millones de tibetanos. «Permítanme reiterar categóricamente que no busco la independencia del Tibet sino una autonomía religiosa», dijo.