La FIA recibe un avalancha de firmas para exigir igualdad de condiciones en McLaren

Inmersos ya en la espiral envolvente del último acto del Mundial de Fórmula 1, sólo cabe consignar como hecho real que Lewis Hamilton y McLaren han convocado a una cierta unanimidad sobre Fernando Alonso. El peculiar carácter del asturiano, actitud directa, tajante en sus planteamientos, arrogante para unos, sincero hasta el límite para otros, ha dejado de ser un elemento de debate. La percepción general, ahora, es que una mayoría abrumadora de españoles sí quiere que gane. «Le tienen que dar palos por todos los lados para que ahora el favor sea unánime. Cuando arrollaba no caía tan bien», se escucha por el paddock entre la colonia española.

Esa animadversión hacia el británico y por extensión a McLaren ha provocado situaciones inusitadas. Por ejemplo, la iniciativa privada de unos aficionados que ha terminado por convertirse en una avalancha pro alonsista frente a la sede del máximo organismo rector del automovilismo, la Federación Internacional (FIA).

La recogida de rúbricas se puso en marcha después de las carreras de Japón y China, pocos días después de que Alonso se descolgase con las declaraciones más potentes de la temporada contra Ron Dennis y la dirección de McLaren. «Más vale callar que mentir como él», dijo después de acabar cuarto en la calificación de Shanghai, con la mosca detrás de la oreja por las presiones de los neumáticos de su coche. Y en menos de una semana y media, la captación se disparó a las cien mil firmas.

La misiva que los seguidores del ovetense han enviado a la FIA lleva el siguiente encabezamiento: «En vista de los hechos acontecidos en el campeonato de F1 2007, y como aficionados y amantes de este deporte, nos vemos en la obligación de denunciar públicamente las irregularidades que han venido sucediendo a lo largo del mismo, y que muestran claros indicios de trato de favor para el piloto L. Hamilton, así como graves perjuicios para el piloto F. Alonso, tanto por parte del equipo McLaren como por la propia Federación Internacional de Automovilismo. «Las presuntas irregularidades son las siguientes:» Y se enumera una ristra de eventuales perjuicios al asturiano, que comienzan en la primera carrera del Mundial 2007, Australia, y terminan con las suspicacias que levantó la Q3 en la calificación del Gran Premio de China. En total se citan doce supuestas irregularidades contra Fernando Alonso por parte de su actual equipo y de la Federación Internacional (FIA). Según los firmantes hubo anormalidades manifiestas en Australia, Bahrein, Mónaco, Canadá, Estados Unidos, Francia, Alemania, Hungría, Italia, Bélgica, Japón y China.