Nobel paradójico

l Banco Central de Suecia ha decidido conceder este año el Premio Nobel de Economía a los estadounidenses Leonid Hurwicz, Eric S. Maskin y Roger B. Myerson por el diseño de mecanismos matemáticos aplicables al funcionamiento de los mercados y de la política social. La complejidad de sus teorías permite discernir, entre otras cosas, cómo se utiliza la información y cuándo el sistema financiero funciona eficazmente. No deja de ser llamativa la elección de los galardonados en un momento en el que los mercados trabajan con la respiración contenida ante las oscilaciones provocadas por la crisis crediticia. Pero lo que resulta paradójico es la constatación de que la investigación y los hallazgos teóricos no evitan quiebras como la actual, cuyas consecuencias reales no sólo no se previeron, sino que fueron minusvaloradas por algunas autoridades monetarias.