La policía busca a un hombre tras hallar el cadáver de su ex novia en Sevilla
El sospechoso desapareció la misma noche del suceso con el coche de la víctima Habían roto la relación sentimental hace tiempo, aunque él la visitaba a menudo
Actualizado:Una mujer de 33 años fue encontrada muerta por asfixia ayer en su domicilio del barrio sevillano de Bellavista, después de haber pasado la noche con su ex pareja sentimental, según afirmaron miembros de su familia. La policía buscaba ayer a este hombre -de nacionalidad argentina y aproximadamente la misma edad de la fallecida-, que desapareció la misma noche del suceso con el coche de la víctima.
Los hechos se produjeron en la madrugada del viernes al sábado cuando la mujer, Sarah R. A., que compartía vivienda con sus hermanas, recibió la visita de su ex pareja sentimental, un argentino afincado en Madrid con el que había dejado su relación hace tiempo, pero al que seguía viendo con cierta asiduidad, según informaron ayer fuentes policiales.
Según las citadas fuentes, la fallecida no ha cursado en ningún momento una denuncia contra su ex pareja, ni pidió en su momento ninguna orden de protección o alejamiento, aunque se está investigando a la espera de nuevos datos que ayuden a esclarecer el caso.
A la mañana siguiente, y ante la tardanza en despertarse y salir de la habitación, las dos hermanas de la fallecida accedieron al dormitorio y se encontraron muerta a Sarah, mientras que su ex compañero sentimental ya se había marchado en el coche propiedad de la fallecida.
Asfixiada
A primera vista, el cuerpo de la víctima no presentaba signos de violencia, pero en la autopsia se ha demostrado que la mujer no tuvo una muerte natural, sino que falleció por asfixia o ahogamiento. Aunque siguen las indagaciones, la policía todavía no ha podido establecer de qué manera se produjo el suceso. Todas las sospechas apuntan a la ex pareja de Sarah, en paradero desconocido.
Los vecinos de la fallecida se mostraron muy extrañados y sorprendidos por lo sucedido. Según relataron, Sarah vivía desde hace poco en el barrio, y compartía un piso de alquiler con sus hermanas. Todos coincidieron en que se habían quedado «atónitos» al enterarse del supuesto asesinato. Uno de los vecinos aseguró que «no hemos podido dormir», debido a que, al residir en el mismo pasillo que la fallecida, ha acogido en su patio a los conmocionados familiares. Sin embargo, ni él ni su mujer vieron ni oyeron nada la noche del viernes.
De confirmarse que se trata de un caso de violencia de género, la víctima sería la octava mujer muerta por este motivo en Andalucía en lo que va de año, y la número 56 de España, según el registro del Instituto Andaluz de la Mujer.