Fertilizantes en peligro
En el primer semestre de 2007 se produjeron en España 2.132.732 toneladas de fertilizantes y se importaron 1.215.754 toneladas. Estos datos muestran que existe una dependencia de los fertilizantes nacionales, pero no tanto como para condicionar el abastecimiento y, por lo tanto, los precios. Andalucía es el mayor consumidor de fertilizantes nitrogenados, con el 31 por ciento de toda España. En este periodo los agricultores andaluces utilizaron 99.400 toneladas de fertilizantes nitrogenados. Respecto a los fosfatados y potásicos, el consumo fue de 70.900 toneladas.
Actualizado: GuardarEl peso de este insumo agrario varía mucho por tipo de cultivo y zona, pero de acuerdo con los últimos datos estadísticos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el coste de los fertilizantes representa alrededor del ocho por ciento de los consumos intermedios de las explotaciones agrícolas y ganaderas. Pero el asunto va más allá. El gas natural supone entre el sesenta y el ochenta por ciento del coste de fabricación del los fertilizantes. El gobierno español aprobó el pasado 28 de septiembre una orden ministerial que incrementa el precio del gas natural para la fabricación de fertilizantes. A comienzos de 2008 se habrá igualado al precio del gas para uso doméstico, lo que supone un alza en la tarifa para este tipo de industria del 75 por ciento. Hay que recordar que la Ley 12/2007 aprobada el pasado julio comprometía un statu quo de los precios hasta 2010. El acuerdo se ha roto sin previo aviso, con un tiempo y una forma desacostumbrados; entre otros factores, porque la orden ministerial tiene menor rango que la ley que contraviene. Ahora, los costes de producción de fertilizantes en España se van a disparar. En esta situación, Fertiberia entraría en pérdidas en varias de sus fábricas, lo que podría conllevar su cierre. Dicha empresa podría deslocalizar las producciones y abrir plantas en otros países, como la que ya dispone en Argelia. En esta situación, la producción española se perdería y los distribuidores y agricultores quedarían a merced de las importaciones. Algo que a nadie le interesa.