Cientos de jerezanos acuden al Villamarta para disfrutar de la gala de San Dionisio

Cientos de personas llenaron el patio de butacas del Teatro Villamarta a mediodía de ayer para presenciar la gala de entrega de los Premios Ciudad de Jerez 2007. Además de las autoridades municipales, familiares y amigos de los galardonados se sumaron ayer al homenaje que les daba la ciudad en la festividad de San Dionisio.

Entre el público asistente, era palpable la presencia femenina, y es que las más de ochenta asociaciones de mujeres de la ciudad y la zona rural recibían -en manos de Francisca Gago- el premio a Igualdad 2007.

Momentos para todo

Durante el acto hubo momentos para todo: emoción, risas, alegría, sana envidia y deleite musical, a cargo de Rosario Lazo La Reina gitana. El público no se aburrió en ningún momento y además estuvo al quite de cualquier incidencia que ocurría sobre el escenario. Así, una espontánea gritó con toda su alma: «¿Qué buenos están los picos, hijo!», cuando el director de la empresa jerezana Picosol fue presa de la emoción y tuvo que interrumpir su intervención.

Como cada año, también hubo diferentes referencias al peso de la réplica del casco corintio que se le entrega a los premiados como emblema de la ciudad. Los galardonados no tenían dónde apoyarlo e, instantes después de recogerlo, tenían que dejarlo en manos del presentador o de algún ayudante para poder dar cómodamente su discurso. Al volver a su asiento, colocaban el casco en el suelo.