Los alcaldes de las pedanías socialistas matizan sus críticas al Ayuntamiento
Guadalcacín y Nueva Jarilla evitan culpar al Consistorio matriz por su crisis económica La denuncia partió del alcalde de La Barca
Actualizado: GuardarLos alcaldes pedáneos de Guadalcacín y Nueva Jarilla, Ana Lirio y Miguel Contreras, respectivamente, quitaron hierro a las críticas vertidas contra el Gobierno local por la situación económica que padece el mundo rural jerezano.
Hay que tener en cuenta que esta situación fue denunciada por el propio alcalde de La Barca, Roque Valenzuela, a través de un comunicado en el que se hacía eco de las reivindicaciones efectuadas por las pedanías socialistas tras el encuentro que mantuvieron el pasado viernes. Según manifestaba Valenzuela, la situación económica de los citados Consistorios, que hacía extensible al resto del mundo rural, es «catastrófica», a la vez que criticaba al Gobierno liderado por Pilar Sánchez por la «falta de soluciones y la dificultad de gestionar con las delegaciones del Ayuntamiento matriz».
Sin embargo, ayer, los citados alcaldes pedáneos, que estuvieron presentes en dicho encuentro celebrado el viernes, quisieron aclarar que «la situación de crisis económica de las pedanías de nuestra ciudad es similar a la que padece el Ayuntamiento matriz de Jerez».
Como consecuencia de ello, «en ningún momento puede interpretarse ni hacerse interpretar tal encuentro ni como una crítica al actual equipo municipal que lidera Pilar Sánchez ni como una demanda de solución inmediata a los problemas que padecemos heredados y de cuya difícil solución somos perfectamente conscientes», expresaban a través de un comunicado.
En definitiva, no quisieron hacer reproches a los miembros del equipo de Gobierno local ni a la alcaldesa, Pilar Sánchez, «que en todo momento se han manifestado no sólo preocupados sino absolutamente partícipes de la necesidad de mejorar la situación de la zona rural y de nuestros ayuntamientos».
Eso sí, como se puede comprobar, en ningún momento negaron los alcaldes de estas pedanías la crisis económica por la que atraviesan sus ayuntamientos, aunque en ningún momento responsabilizaron de ello al Consistorio matriz, como hiciera el día anterior el alcalde de La Barca.
Roque Valenzuela aseguraba, sin embargo, que «el mundo rural depende única y exclusivamente de las transferencias que proceden del Ayuntamiento de Jerez», por lo que lo culpaba de la práctica imposibilidad de hacer frente a los gastos corrientes de las administraciones pedáneas, es decir, nóminas de sus empleados, Seguridad Social, agua, luz y teléfono, básicamente.