Prodi y Barroso, convencidos de que el nuevo Tratado de la UE será aprobado en la cumbre de Lisboa
De ser así, el nuevo tratado podría entrar en vigor antes de las elecciones europeas de la primavera de 2009
BRUSELASActualizado:El primer ministro italiano, Romano Prodi, y el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, se han mostrado convencidos de que habrá un acuerdo sobre el Tratado de Reforma de la UE en la próxima cumbre informal que se celebrará la próxima semana en Lisboa.
"Soy optimista sobre la próxima cumbre" del 18 y 19 de octubre, ha afirmado Prodi tras una visita a la CE, que ha incluído varias reuniones con comisarios y con Barroso. El borrador será analizado por los jefes de Estado y Gobierno de la UE en la cumbre de Lisboa, de forma que pueda ser firmado formalmente a comienzos de diciembre. El jefe del Gobierno italiano ha manifestado que está "seguro de que se logrará un acuerdo", tras lo cual podrá comenzar el proceso de ratificación y el nuevo tratado podrá entrar en vigor antes de las elecciones europeas de la primavera de 2009.
Por su parte, Barroso ha considerado que la elaboración del borrador del tratado, difundido la pasada semana por la presidencia portuguesa, es "un gran logro", tras el cual "estamos muy cerca" de una solución. El presidente de la Comisión ha dicho que en la cumbre de Lisboa los países de la UE "harán todo lo posible" para solucionar los últimos obstáculos y mostrar a los ciudadanos que Europa es capaz de avanzar.
El reparto de escaños favorecerá a España
El jefe del Gobierno italiano ha rechazado la posibilidad de que su país pueda bloquear el nuevo tratado por el nuevo reparto de escaños en el Parlamento Europeo, que estudia una propuesta en este sentido, en la que España es la más favorecida (cuatro escaños más) e Italia no recibiría ninguno adicional.
Prodi ha asegurado, en una conferencia de prensa conjunta con Barroso, que no ha tratado en la CE la cuestión del déficit público italiano, pero ha asegurado que en 2007 estará "firmemente" por debajo el nivel del 3% del PIB.
Barroso confia en ese compromiso italiano de forma que la Comisión pueda recomendar cerrar el procedimiento abierto contra Roma por déficit excesivo. Además, el responsable del Ejecutivo comunitarioha insistido en que el Gobierno italiano continúe su política de consolidación fiscal.