Un ayudante del 'sheriff' causa una matanza al abrir fuego en una fiesta en Wisconsin

na nueva matanza indiscriminada, con al menos siete muertos, volvió a sacudir ayer EE. UU., un país en el que este tipo de episodios se producen con relativa frecuencia. Sin embargo, en esta ocasión, el autor iba armado debido a la labor policial que realizaba. Todo ocurrió en la población de Crandon, al norte del estado de Wisconsin. Sin que mediase provocación alguna, Tyler Peterson, un adjunto del sheriff del Condado de Oconto, comenzó a disparar en una casa situada en el cruce de las calles Hazeldell y Washington, donde se celebraba una fiesta.