«Me cuidan de maravilla; lo daría todo por triunfar en el Cádiz»

-Al principio, sobre todo, un poco duros. Poco a poco estamos yendo a más y, si seguimos así, conseguiremos algo importante. Tenemos que quitarnos el miedo. Ya le estamos cogiendo el ritmo a la categoría.

-Muchos de los puntos que se han escapado han sido en acciones puntuales que podían haberse evitado...

-Sí, claro. La veteranía es un grado, y en esto del fútbol se nota. Teóricamente, hombre por hombre nosotros tenemos mejor equipo, lo que pasa es que es difícil demostrarlo porque somos jóvenes. Estoy seguro de que en la segunda vuelta va a ser muy difícil ganarnos.

-¿Cree que se están dando suficientes oportunidades a la cantera?

-Sí. Remón confía en la cantera, y de hecho muchos de nosotros ya hemos entrenado con el primer equipo. Yo ya he ido dos veces con ellos y he estado muy bien. Entreno día a día para eso, para que me llamen. Lo que me gustaría decir es que tanto yo como mis compañeros nos alegramos mucho de que debutara Carliños. Eso nos hace venirnos arriba. Nunca he dicho que tengan que mirar más en el Cádiz B antes que en el juvenil. De hecho, todos estamos al mismo nivel y trabajamos día a día para eso. Aquí no hay cabecillas.

-Entonces, ¿su objetivo es convertirse en futbolista profesional?

-Mi sueño sería quedarme en el Cádiz; lo daría todo. Aquí me tratan de maravilla y me lo paso genial con mis compañeros. De hecho, me da pena cuando se acaba el entrenamiento y quiero quedarme más. Aunque, si en el Cádiz no le gustase a quien le tengo que gustar y me saliera una oferta buena, pues no tendría más remedio que mirar por mi futuro y marcharme.

-¿Qué tal su etapa en el Betis?

-No me fue muy bien. Eso es otro mundo, pero no otro mundo mejor. Allí nos tenían en una residencia en Bellavista, y no podíamos salir porque los niñatos nos querían pegar. Aparte, yo tenía que entrenar con la camiseta antigua de Oli y gastada, no había material...