Competencia estudia si el anunciado encarecimiento de los alimentos es una estrategia de los fabricantes

La Comisión Nacional de Competencia (CNC) está estudiando si los fabricantes de alimentos y productos manufacturados han incurrido en conductas contrarias a la competencia al advertir de que estos productos van a encarecerse por el alza de las materias primas.

Así lo ha apuntado hoy el presidente de este organismo, Luis Berenguer, quien ha explicado que "no hay ningún procedimiento iniciado", pese a lo cual la CNC observa "con preocupación" que responsables y representantes de organizaciones que agrupan a estos fabricantes han hecho declaraciones públicas "coincidentes en el tiempo" advirtiendo de estas subidas.

Berenguer ha señalado que el organismo que preside está recopilando datos para averiguar si esta conducta supone "lanzar un aviso a navegantes" o el mensaje a los fabricantes del ramo de que encarezcan sus productos, y comprobar si, en definitiva, se trata de una manera "sofisticada" de infringir la normativa de competencia para influir en la fijación de precios.

Por el momento, la Comisión (un órgano de nueva creación que agrupa los antiguos Servicio y Tribunal de Defensa de la Competencia) está en un proceso de "elaboración teórica", recogiendo datos para comprobar "cuáles pueden ser los efectos anticompetitivos de esta nueva forma sofisticada", pero no ha querido confirmar si habrá finalmente una intervención, porque el expediente que se abriría quedaría ya "contaminado".

"Hay una posibilidad" de actuación, ha reconocido Berenguer, quien ha aclarado que en Economía este tipo de conductas se conocen como "actos focales", mediante los cuales los interesados "focalizan la atención sobre un punto" o un mensaje para influir en la fijación de los precios, y esta conducta "puede justificar la actuación de la CNC".