El presidente del PP, Mariano Rajoy, responde a los periodistas en Vilagarcía. / EFE
arremete contra zapatero

Rajoy cree que el PP ganará los comicios de 2008 con más facilidad que en 1996

Afirma que está dispuesto a incorporar a nacionalistas y personas de izquierda a su gobierno

MADRID Actualizado: Guardar
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Mariano Rajoy tiene la convicción de que el PP ganará las próximas elecciones generales con más facilidad que en 1996, cuando el partido estaba liderado por José Maria Aznar. Basa su seguridad en que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero es peor que el de Felipe González y que su oposición es más reconocida por los ciudadanos que la de Aznar. El líder opositor también se muestra dispuesto, si gobierna, a incorporar a los nacionalistas y a personas de la izquierda.

Rajoy no tiene dudas de que será el próximo presidente del Gobierno "si el PP obtiene un escaño más que el PSOE" pues no se imagina que los socialistas rompan, con alianzas y cambalaches con fuerzas minoritarias, la tradición instaurada en 1977 de que el que gana, gobierna. Fundamenta su pronóstico victorioso en que si bien el Gobierno socialista de 1996 "lo hacía mal", el de Rodríguez Zapatero "ha superado todos los registros". La segunda razón, a su juicio, es que hace 11 años, "mucha gente no sabía qué era el PP" porque nunca había gobernado, pero hoy los ciudadanos "saben como gobierna el PP".

El líder opositor también se muestra seguro de que su partido sabrá recomponer las alianzas con los nacionalistas si los necesita para tener mayoría parlamentaria. Considera, en una entrevista publicada por el diario 'Faro de Vigo', que en la actualidad es "mucho más que factible" que un hipotético gobierno suyo cuente con los nacionalistas, en concreto, "es posible" que haya "nacionalistas catalanes".

Dice estar dispuesto a actuar con "flexibilidad" para sumar a los nacionalistas a su proyecto, pero no a costa de triturar sus convicciones. Rajoy cree que el principal problema en las negociaciones con estas fuerzas es que el nacionalismo siempre quiere "más" y "nunca se da por satisfecho". Pero, pese a estas consideraciones, cree posible llegar "a un pacto de gobierno" como ocurrió en 1996, y pone como ejemplo el de Coalición Canaria, que hasta las últimas elecciones autonómicas "estaba incondicional con el Gobierno, y en 24 horas formó un gobierno de coalición con el PP".

También se muestra dispuesto a contar en su equipo gubernamental con personas de izquierda como ha hecho el presidente francés, Nicolás Sarkozy. Rajoy ve "muy posible" emular esa fórmula y, por tanto, esa posibilidad "está abierta" porque "la gente tiene derecho a rectificar, a creer que las cosas se pueden hacer de otra manera".

Engaño

El líder opositor se muestra defraudado con Rodríguez Zapatero porque aunque afirma que no se llevan mal, "me engañó dos veces", con la reforma del Estatuto de Cataluña y en el diálogo con ETA. En consecuencia, "hoy no" cree al presidente del Gobierno porque siempre pensó que en cuestiones de Estado "me diría la verdad". Rajoy subraya además que no ha sido el único engañado porque "lo mismo" ha ocurrido con el líder de CiU o con los dirigentes de Esquerra Republicana y del PNV.

El presidente del PP apunta asimismo que está dispuesto a contar con Rodrigo Rato, "a todos nos gustaría" porque es "una persona muy valiosa que está ahí". Recordó, no obstante, que el actual gerente del Fondo Monetario ha dicho, y asegura que se lo confirmó en persona, que "no quería seguir en la vida política". De momento, añade, "estamos en el ya veremos".

Rajoy se muestra incómodo en la polémica suscitada con Unión del Pueblo Navarro y su demanda de contar con un grupo parlamentario propio y desgajado del PP. Atribuye la controversia a que "estamos en verano y no hay demasiadas noticias", y, en consecuencia, se sobredimensionan asuntos menores. Adelanta, no obstante, que "no va a pasar nada" y todo seguirá como está porque el PP "es un partido que tiene un proyecto nacional", que es "conciliable con los proyectos que tiene cada uno para su territorio". En todo caso, remata, el PP nunca será "la suma de 17 partidos".