Los análisis revelan que no hay un tercer caso de fiebre aftosa en Reino Unido
Brown intenta tranquilizar a los ciudadanos y anuncia compensaciones económicas para los granjeros afectados
LONDRESActualizado:Los análisis practicados a los animales de una tercera granja en el sur de Inglaterra, en la que se sospechaba que podría haber un nuevo brote de fiebre aftosa -ya van dos-, han revelado que no habían contraído la enfermedad, pese a lo que han sido sacrificados esta semana como medida de precaución.
Tras confirmarse la presencia de fiebre aftosa en una granja de Surrey (sur de Inglaterra) el viernes pasado, las autoridades anunciaron el lunes que los animales de una granja cercana también habían contraído la enfermedad. A continuación, se informó de una tercera granja con un posible brote, dentro de la zona de seguridad en torno a la primera, por lo que se procedió a sacrificar a los animales, si bien hoy se ha sabido finalmente que no estaban enfermos.
Otra granja investigada
Por otra parte, en las últimas horas se ha tenido conocimiento de la posibilidad de otra granja afectada, si bien su propietario, Laurence Matthews, está "absolutamente seguro" de que sus animales no tienen fiebre aftosa, pese a lo cual el establecimiento ha quedado sellado y se han tomado muestras a sus terneros para descartar la enfermedad.
De hecho, la veterinaria jefe del Gobierno, Debby Reynolds, considera que el nivel de sospecha en torno a esta cuarta granja, que se encuentra dentro del perímetro de vigilancia de 10 kilómetros establecido en torno a la primera, es "bajo".
El primer ministro británico, Gordon Brown, ha intentado tranquilizar a los ciudadanos asegurando que se está haciendo todo lo posible para restablecer la normalidad y subrayando que "Reino Unido está abierto para los negocios". Asimismo, ha alabado a la población rural por su "paciencia" y ha anunciado que los granjeros de las zonas afectadas recibirán compensaciones "en los próximos días"..
Brown ha presidido varias reuniones del llamado comité de emergencia Cobra para tratar este problema y evitar que se repita la epizootia del año 2001, que causó cuantiosas pérdidas económicas a los ganaderos.