Zapatero anuncia un «gran salto» en vivienda joven antes del fin de la legislatura
El jefe del Ejecutivo ha tratado temas de interés para los jóvenes como la vivienda, el empleo o la asignatura de Educación para la Ciudadanía
MADRID Actualizado: GuardarEl presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha anunciado hoy que antes de que acabe la legislatura, en el próximo otoño, el Ejecutivo socialista dará un "gran salto" para facilitar a los jóvenes el acceso a la vivienda y contribuir a su emancipación fomentando las políticas de alquiler.
En la clausura del XXIII Congreso de las Juventudes Socialistas, el jefe del Ejecutivo abordó los principales asuntos que preocupan a los jóvenes, como la vivienda o el empleo, y pronunció un discurso en el que mezcló un balance positivo de los tres años de Gobierno socialista con anticipos de la segunda etapa que sucederá tras las elecciones generales y que según él será "más ambiciosa".
Zapatero aprovechó para animar a los jóvenes de las JSE a que defiendan los valores socialistas, particularmente iniciativas como la asignatura de Educación para la Ciudadanía, porque enseña los valores de la Constitución en una sociedad aconfesional y laica, que es a su juicio la que mejor encarna los valores democráticos.
Su mensaje sobre la vivienda consistió en un compromiso para abordar antes de que acabe la legislatura "un gran salto en política de vivienda" que según el presidente facilitará la "emancipación" y el acceso de "un gran número de jóvenes", aunque no dio más datos. Posteriormente, fuentes gubernamentales aclararon que las medidas en esta materia se referirán al alquiler y se concretarán en otoño.
Según el jefe del Ejecutivo, "la mejor manera de hacer ciudadanos españoles es respetar y apreciar la Constitución", precisamente el objetivo de esta asignatura, sobre la que solicitó una "defensa continua" a los jóvenes socialistas. Aseguró que el rechazo a esta disciplina demuestra "hasta qué punto se puede intentar hacer demagogia y no entender cuál es el auténtico patriotismo". En este sentido, Zapatero advirtió que "ninguna fe puede imponerse en las leyes" porque en un sistema democrático caben todas las opciones y creencias e insistió en los valores de una sociedad aconfesional y laica para garantizar la pluralidad y la tolerancia.
No quiso hablar del PP
El presidente del Gobierno dijo que no quería hablar del PP, e incluso se permitió bromear ante los jóvenes socialistas al justificar su decisión porque hoy se había levantado "feliz y contento". Afirmó que ya le había dicho todo al líder de ese partido, Mariano Rajoy, en el debate sobre el estado de la Nación y le emplazó directamente a los resultados de las próximas elecciones.
Su alocución estuvo salpicada de aplausos de los asistentes, y Zapatero les obsequió con argumentos muy optimistas para el futuro, en una próxima legislatura que dio por hecho que tendrá gobierno socialista y en la cual habrá "más reformas" en favor de la igualdad, las políticas sociales, los derechos y la innovación.
Algunas de estas iniciativas consisten en seguir impulsando la subida de las pensiones mínimas por encima del IPC o aumentar de la cuantía del Salario Mínimo Interprofesional, que aunque llegará a 600 euros cuando acabe la legislatura, para Zapatero aún es "impropio" de un país que es la octava potencia mundial.