Un empresario siempre vinculado a la comunicación

Jesús de Polanco Gutiérrez, presidente y accionista mayoritario de Prisa, uno de los grupos de comunicación más relevantes a escala internacional, ha fallecido hoy en Madrid, tras toda una vida dedicado a la comunicación y a la edición de libros.

Nacido en la capital de España el 7 de noviembre de 1929, se licenció en Derecho por la Universidad Complutense en 1953. Fundó la Editorial Santillana, fue uno de los impulsores del diario El País y participó en la introducción de la televisión digital en el mercado español de la comunicación.



Desde Santillana a Prisa

Comenzó su trayectoria profesional en el mundo editorial a los 17 años a través de la comercialización de libros. En 1958 fundó la Editorial Santillana, en un principio especializada en textos jurídicos y, posteriormente, dedicada a los libros de texto. Santillana fue el germen del grupo editorial que engloba también a otros sellos de gran tradición como Taurus, Alfaguara, Altea, Aguilar y que está gestionada por el Grupo Timón, constituido en 1972.

En 1973 Jesús de Polanco se incorporó al grupo fundacional del diario El País, referente de la transición española a la democracia y el periódico de mayor difusión e influencia en España. Consejero delegado entre 1975 y 1984 del grupo de comunicación Prisa, editora de El País, fue presidente ejecutivo del grupo desde junio de 1984. Durante su gestión en Prisa, fue el máximo responsable de la expansión de la compañía y de la apertura a nuevas actividades en radio, televisión y cine.

Tras el intento fallido de consolidar Radio El País, el Grupo Prisa se hizo con una participación de la Cadena Ser y, posteriormente, con el control de la emisora, líder de audiencia en España. Polanco fue designado consejero de la misma en 1985 y vicepresidente en 1988. Fue presidente de la cadena radiofónica desde 1990 y de Unión Radio, la mayor red de emisoras de radio en el área de habla hispana, desde 1993.


Pionero en la televisión digital en España

En el área televisiva, desde 1989 presidió Canal Plus, la primera cadena de pago de España, participada por el grupo Prisa, así como Sogecable, cuyo máximo accionista es el Grupo Prisa, de 1989 a 2004. La sociedad, propietaria de la televisión de pago vía satélite Digital+ se fusionó con la plataforma de Telefónica tras un largo conflicto empresarial y político, y Rodolfo Martín Villa le sucedió en el cargo.

Además, impulsó el desarrollo de actividades de producción cinematográfica a través de la compañía Sogetel, amplió la oferta periodística de Prisa con el diario económico Cinco Días y el deportivo As y lanzó Cuatro, cadena de televisión generalista en abierto de Sogecable. Su hijo, Ignacio Polanco, fue designado vicepresidente del Grupo Prisa, con vistas a sucederle en la presidencia cuando dejara el cargo.


Premios y títulos

Fue miembro de la Academia Europea de las Artes y de las Ciencias y del Patronato de la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción, también copresidió el Patronato de la Fundación Escuela de Periodismo del diario. Tiene la medalla de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (1982), el premio Juan Lladó de apoyo a la cultura y a la investigación (1994), la medalla de oro del Spanish Institute de Nueva York (2002), el premio Montblanc al Mecenazgo de las Artes (2003) y la Legión de Honor de Francia (2004).

También fue distinguido como hijo adoptivo de Cantabria por su espíritu emprendedor en los campos de la educación y la información en 1997, el mismo año en que fue investido doctor honoris causa en Humanidades por la Universidad estadounidense de Brown.

En 2007 fue condecorado con la Gran Cruz de la Orden al Mérito del Gobierno chileno y recibió el reconocimiento de la Asociación de la Prensa de Madrid. Según la lista de Forbes de marzo de 2007 Jesús de Polanco ocupaba el puesto 287 entre los hombres mas ricos del planeta, con una fortuna estimada en 3.000 millones de dólares en 2006. En el ámbito judicial, tuvo que hacer frente en 1997 a un proceso abierto por el juez Javier Gómez de Liaño contra Sogecable por presunta apropiación indebida, aunque la denuncia fue archivada y Gómez de Liaño condenado por prevaricación.