Sarkozy visita Alemania en su debut como presidente francés para relanzar la UE
Uno de sus primeros actos como jefe del Estado fue rendir homenaje en el parque Bois de Bologne a 35 combatientes asesinados por los nazis
Actualizado: GuardarNicolas Sarkozy ha sido investido hoy sexto presidente de la V República francesa. Al final de una jornada marcada por las ceremonias, desde la de investidura hasta el homenaje a 35 jóvenes de la resistencia asesinados durante la ocupación nazi, el nuevo jefe del Estado ha viajado a Alemania para poner de manifiesto que "Francia ha vuelto a Europa", como aseguró el pasado 6 de mayo cuando fue elegido mandatario.
A mediados de esta tarde, Sarkozy cogió un avión con destino Berlín, donde se reunión con la canciller alemana, Angela Merkel, visita con la que pone la Unión Europea en lo más alto de una agenda presidencial que Sarkozy acaba de estrenar.
El relanzamiento de una construcción institucional europea que se encuentra frenada tras el 'no' francés y holandés al Tratado Constitucional Europeo en 2005 es la prioridad de la presidencia alemana del Consejo Europeo. También lo es para Sarkozy, quien lo demostró con su visita a Berlín en la tarde del mismo día en que fue investido presidente de la República.
Ni siquiera su predecesor, Jacques Chirac, para quien la construcción de una Europa política fuerte también fue clave en su mandato, visitó antes al jefe de Gobierno alemán cuando accedió al Elíseo. Su primera visita, fechada en mayo de 1995, al canciller Helmut Kohl se produjo el día después de que Chirac contara con las llaves del palacio presidencial francés.
Un día lleno de ceremonias
A primera hora de esta tarde, en la última de las ceremonias que protagonizó Sarkozy, dedicada a rendir un homenaje a 35 resistentes a la ocupación nazi fusilados el 16 de agosto de 1944 en el parque parisiense de Bois de Bologne, el nuevo presidente ya destacó la importancia de su visita a Alemania.
"Que el recuerdo del gran crimen que conmemoramos hoy os haga obrar por la paz entre los hombres", dijo sobre la tribuna instalada en el parque parisiense. "Que os haga comprender por qué la reconciliación franco-alemana fue una especie de milagro y por qué nunca nada debe conducir a sacrificar la amistad que, después de tantas pruebas, vincula al pueblo francés con el pueblo alemán", agregó. Con estas palabras, Sarkozy presentó "la razón por la cual voy a ver en unos instantes a la canciller".
Primera ley de tinte patriótico
En su primer día como presidente, una vez hubo despedido del Elíseo al presidente saliente, protagonizado su investidura recibiendo además el collar de la orden de la Legión de honor, y haber depositado dos ramos conmemorativos en la Tumba del soldado desconocido y en la estatua del general Charles de Gaulle de los campos Elíseos, Sarkozy anticipó una medida legislativa dedicada a la memoria de la resistencia francesa a la ocupación nazi.
En el Bois de Bologne, el presidente anunció que su primera decisión será la de hacer obligatoria la lectura de la última carta a sus padres del resistente comunista Guy M'quet, fusilado por los nazis en 1941 con 17 años. La carta fue leída en la ceremonia celebrada en el parque parisiense, y sobre ella Sarkozy afirmó que "nunca he podido leer o escuchar la carta de Guy M'quet sin estar profundamente emocionado".