![](/RC/200705/12/Media/arzalluz--200x160.jpg?uuid=6e4dd6ee-006e-11dc-9bc9-37d3f667462b)
El etarra Asier Arzalluz Goñi, condenado a 32 años de prisión
Por los delitos de estragos terroristas, robo de vehículo y detención ilegal por la colocación de un coche-bomba en enero de 2002 en Bilbao
Actualizado: GuardarLa Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha condenado al etarra Asier Arzalluz Goñi a 32 años de prisión por los delitos de estragos terroristas, robo de vehículo y detención ilegal por la colocación de un coche-bomba en enero de 2002 en Bilbao.
El acusado, que pertenecía al "comando Olaia", tendrá además que pagar 1.662.199 euros en concepto de responsabilidad civil por los daños causados en bienes inmuebles (1.550.830, 99) y en vehículos aparcados en los alrededores (111.369, 49).
El tribunal ha tenido en consideración la declaración ante la policía del etarra Gorka Martínez que reconoció la pertenencia de Arzalluz al comando.
Obra del "comando Olaia"
Según la sentencia, hecha pública hoy, las pruebas periciales permiten acreditar que la acción terrorista la realizó este grupo terrorista mediante el robo a punta de pistola de un vehículo que fue colocado poco más de una hora después en la confluencia de las calles Gran Vía y Alameda De Mazarredo. En el interior del coche se había colocado un artefacto explosivo compuesto por 30 kilos de dinamita.
Tras sustraer el coche, los terroristas introdujeron al conductor en la parte trasera del vehículo con las manos atadas y una capucha en la cabeza. Minutos más tarde, los etarras le bajaron del coche y le dejaron atado a un árbol, siendo liberado por un ertzaina dos horas más tarde.
El tribunal considera probado por todo lo mencionado anteriormente que Arzalluus Goñi "tomó la decisión de ejecutar la acción terrorista asumiento el 'iter' fáctico probado".